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Los ala pivotes de la historia de la Liga no han sido tantos como los perimetrales, pero igualmente a medida que hacíamos el recorrido por estos 35 años íbamos anotando y sumando. Y así arribamos a una nueva complicación para definir a los cinco, aunque quedamos conformes. 

Hernán Montenegro es indudablemente uno de los internos más talentosos que ha dado nuestro básquetbol y no podía faltar. Es nuestro Charles Barkley o Karl Malone: campeón sin anillo. Estuvo un par de veces cerca (Estudiantes de Bahía, Independiente de Pico), pero se le negó. Su inconstancia lo llevó a que, de las 16 temporadas en las que al menos jugó 1 partido, solo 4 las jugó completas. Igual, un crack. 

Los otros cuatro son casi contemporáneos. El más veterano de ellos es otro fija: Diego Osella, que aunque por momentos ha jugado como pivote, ha sido históricamente un cuatro, básicamente en Atenas, con los que ganó 6 campeonatos de Liga. Es el segundo jugador con más presencias en la historia (1096 partidos), marca que difícilmente alguien pueda sacarle en los próximos 10 años. 

Si seguimos por orden cronológico, tendríamos que colocar al que, para nosotros, es no solamente el mejor cuatro de la historia sino el mejor jugador de todos los tiempos de la Liga: Leonardo Martín Gutiérrez. El cordobés, además de ser el récordman con 10 títulos de Liga (sobre 23 temporadas jugadas, una bestialidad), ganó Sudamericanas, Liga de las Américas y durante un buen tiempo fue el jugador con más presencias en la selección, incluso más que Scola. Nadie lo puede discutir. El GOAT argentino.

Otro que se lució en Olimpia y en Atenas, pero también San Lorenzo, es Walter Herrmann, iniciado como alero pero con muchos años también como ala pivote, por eso entró en esta lista selecta. Campeón con Atenas (MVP de las finales) y con San Lorenzo (ídem), Herrmann no estuvo tanto tiempo en Argentina por sus pasos por Europa y la NBA, pero igual dejó su marca. ¿Estará retirado o volverá a jugar?

El último de la lista es, obviamente, el Tortu Deck, dueño y señor de sus últimas dos temporadas en la Liga Nacional, siendo campeón con San Lorenzo. Deck es el cuatro moderno que, sin tener demasiada altura, juega un poco por todos lados, hace goles de distinta manera y ataca al aro con potencia. El último fenómeno salido en el puesto y el que todavía tiene tiempo de sobra para ser el mejor de todos.