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Siempre se dijo que Argentina era una gran generadora de jugadores de media cancha. Y si ayer tuvimos problemas para elegir cinco bases dentro de una gran cantidad de excelentes jugadores, algo similar nos ocurrió ahora con los escoltas. 

En este caso, creemos que son casi todos indiscutidos, más allá de que, como con los bases, haya algunos que fueron protagonistas de la primera época y no son ya tan reconocidos por la gente más joven, aunque eso no nos invalida en absoluto para integrar esta lista. 

Iremos de más antiguos a más nuevos. De las primeras temporadas, Carlos Raffaelli no puede estar ausente, porque fue el mejor escolta del país de la historia hasta la aparición de la Generación Dorada y Manu Ginóbili. Le tocó la última parte de su carrera en la A, pero igual desparramó talento en Estudiantes de Concordia, San Andrés y Boca. Enorme jugador, de lo mejor que dio el país. 

Carlos Romano, hoy entrenador, fue de hecho muchos años compañero de Chocolate en Obras, pero en la Liga tuvo una carrera más extensa, 7 temporadas, en las que dejó una marca que hoy parece imposible: 20.2 puntos de media en todos esos años, lo que le permite estar todavía entre los cinco argentinos con mejor promedio histórico, solo superado por Jorge Racca, Pichi Campana y Juan Espil, nada menos. Tirador letal y gran armador de juego. 

Nombrábamos a Pichi Campana y a Juan Espil y obviamente ellos dos son parte de este quinteto de forma inamovible. Pichi y Juan, de hecho, armaron una gran rivalidad en los 90, cuando el cordobés se destacaba en GEPU y Atenas y Espil en Estudiantes de Bahía. Las cosas se dieron de tal manera que Espil terminó siendo campeón con GEPU en 1992/93, dos años después que Campana con esa misma camiseta.

Pichi se mantiene como el máximo anotador histórico de la Liga Nacional, con unos inalcanzables 17359 puntos en 785 partidos, mientras que Espil, con seis temporadas menos que Campana, está cuarto con 12472 en 589 partidos. Goleadores feroces, con el aro entre ceja y ceja, aunque con características muy distintas, fueron un clásico de las primeras décadas de la competencia. 

El quinto elegido es el escolta de hoy, el moderno, reflejado en Paolo Quinteros. A sus 41 años, Paolo sigue demostrando su talento en Regatas Corrientes, también mostrándose como un goleador empedernido, pero habiéndole agregado a su juego las cosas que se van sumando con la edad y la experiencia. Quinteros se ha ganado un puesto en este quinteto en base a juego, permanencia y títulos. 

Algunos de los enorme jugadores que nos quedaron afuera de la lista fueron Chuzo González, Ariel Bernardini, Julio Mázzaro, Chuni Merlo, Eduardo Dominé, Selem Safar y Diego García, pero hubo muchos más.