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Ayer, el ciclo de Quin Snyder en Utah Jazz llegó a su fin, con la renuncia del entrenador al equipo tras 8 temporadas, en las que, si bien tuvo buenos resultados en la fase regular, no llegó a cumplir nunca los objetivos en los playoffs. Le faltó carácter, decisión y, sobre todo, química entre sus principales estrellas, además de liderazgo. 

Con la salida de Snyder, Utah entró en reestructuración, y eso incluye absolutamente todo. Ya había dejado ir durante el año a Joe Ingles, figura emblemática de la franquicia, y ahora los que vengan deberán decidir qué hacer con el conflicto más grande que les queda adentro: la falta de unión entre Donovan Mitchell y Rudy Gobert, que Snyder disimulaba un poco. 

Adrian Wojnarowski publicó lo que Mitchell piensa tras la salida de Snyder, que no es bueno ni positivo: Woj dice que Mitchell está inquieto, desconcertado y preguntándose qué significa para el futuro de la franquicia la renuncia de Snyder, además de sentirse sorprendido y disgustado por la decisión del coach, ya que él fue la principal razón por la que renovó por 5 años en el 2020 y 163 millones de dólares. 

Ahora, todos es incertidumbre en Utah. Por un lado, necesita fichar a un entrenador. Según Shams Charania, los principales candidatos son Johnnie Bryant (asistente en New York), Alex Jensen (asistente en Utah), Terry Stotts, Will Hardy (asistente en Boston), Adrian Griffin (asistente en Toronto), Charles Lee (asistente en Milwaukee) y Kevin Young (asistente en Phoenix). 

Después de eso, también tendrán que analizar qué hacen con su roster. Tienen dos estrellas muy atractivas para todo el resto de las franquicias, por lo que podrían sacar un muy buen rédito por ellas, pero al mismo tiempo perderlas. ¿Buscarán seguir con una al menos, o con las dos e intentar descomprimir la relación entre ellos? Todo está por verse. Pero el momento es de crisis.