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Como cambia el panorama cuando llegan los Juegos Olímpicos. Tras el ‘batacazo’ de Estados Unidos en el pasado Mundial de Baloncesto, las grandes estrellas de la liga corrieron a declararse disponibles para una nueva versión del Redeem Team de 2008. Aunque últimamente cada cita olímpica posterior a un Mundial se tome como revancha para los norteamericanos. El último en proclamar sus deseos de acudir a París 2024 ha sido Kyrie Irving, que lleva desde 2016 sin ir con la selección estadounidense.

Ahora mismo parece haber sólo seis jugadores de participación fija en los JJ.OO estando sanos: LeBron James, Stephen Curry, Kevin Durant, Joel Embiid, Jayson Tatum y Jrue Holiday. Este último una obsesión de Grant Hill y Steve Kerr. Irving ya fue oro en el Mundial de 2014, MVP incluido y en Río 2016. Lo cierto es que su salud y polémicas le han mantenido alejado de las últimas citas del equipo nacional.

Ahora, Irving parece lejos de la controversia que le rodeó en tiempos pasados. Especialmente en su etapa en Brooklyn. Ahora bien, con seis puestos ya ocupados, dos de ellos en la posición de base, la competencia será feroz. Y que Shams Charania filtre esto ahora puede ser una táctica para tomar posición frente a otros exteriores como Damian Lillard, Tyrese Haliburton, Jalen Brunson o incluso James Harden. De momento, no se atisban favoritos por parte del Team USA. Pero, viendo el carácter de ‘último baile’ que está tomando la convocatoria, quizás Kyrie se gane el hueco por mera veteranía.