Tokio 2020

Un crecimiento constante: Japón desde la llegada de Lamas

18:23 29/07/2021 | Desde 2017, momento en que contrataron al entrenador argentino, los japoneses cambiaron completamente su forma de juego y han mejorado de manera exponencial.

Japón, el próximo rival de Argentina (FIBA).

Con el objetivo de se protagonistas en los Juegos Olímpicos actuales, Japón decidió contratar en 2017 al argentino Julio Lamas como entrenador. A partir de allí, el entrenador puso toda su experiencia y le dio una identidad diferente al equipo asiático, que poco a poco lo ha acercado a la elite mundial.

Su primera decisión fuerte fue rejuvenecer el plantel y buscar una identidad propia, con cambios profundos, como lo expresó hace días en una entrevista con Básquet Plus. A partir de ese momento bajó el promedio de edad y apostó a aumentar la talla del plantel, además de darle las riendas del equipo a Hachimura y Watanabe, los dos NBA que hoy en día tiene Japón.

Un primer cambio se vio en la clasificación del seleccionado para el Mundial de China 2019, donde obtuvieron ocho victorias en 12 partidos, incluido un triunfo frente a Australia que dio muestras del avance. Allí no solo se apoyaron en los jóvenes, sino que apostaron en el nacionalizado Fazekas como otra de sus figuras, a partir de su experiencia y fortaleza en la pintura. De esta manera, Japón llegaba a la cita mundial por primera vez luego de haber estado en 2006, en lo que sería su quinta participación en la historia de esta competencia.

Ya en este torneo jugado en China se pudo ver a un conjunto japones distinto, apostando a un ritmo de posesiones más alto y con una defensa intensa. “Tenía el objetivo inicial de subir el promedio de estatura, mejorar la condición atlética y construir un estilo propio de juego” explicó Lamas.Allí, a pesar de estas mejoras, se fue en el puesto 31 y sin victorias en su haber, aunque habiendo enfrentado a varios de los mejores equipos y obtenido roce internacional.

Estos dos años post Mundial hicieron que terminaran con el cambio profundo en su identidad, tal cual expresó el entrenador: “Estudiando las estadísticas avanzadas del torneo y viéndolo todo otra vez, cambiamos algunas cosas en la defensa, pocas pero profundas, que modifican nuestro nivel de agresividad defensivo. Esto es, más presión sobre el balón, un triángulo más alto para achicar los espacios y algunas reglas más agresivas sobre el pick and roll. Y cambiamos todo nuestro sistema de ataque, con un spacing cuatro por fuera y uno por dentro, incluso en algunas transiciones a veces 5-0, hasta que llegamos al pick and roll y quedamos 4-1. Atacamos el rebote ofensivo con 3 jugadores, lo que nos ayuda a tomar algún rebote más, pero sobre todo a iniciar mejor la transición a defensa, para que no nos corran tanto como en el Mundial”.

Prueba de estos avances es la primera victoria del equipo ante Francia, en el último amistoso previo a los Juegos Olímpicos, por 81 a 75. Además, con el objetivo de seguir afianzando la idea de juego, disputó otros siete amistosos, tres ante Irán y los demás frente a Hungría, Bélgica y Finlandia.

En esta competencia, la apuesta por la dupla NBA Hachimura-Watanabe es la clave para el conjunto asiático, con el jugador de Washington Wizards como segundo goleador actual de la competencia con 27 puntos de promedio y el de Toronto Raptors en el décimo segundo puesto con 18 unidades por juego.

De esta manera, se vio un equipo que se acerca lo más posible al estilo de juego actual en el mundo, de mayor cantidad de tiros y posesiones. Se ve reflejado en el cambio estadístico con respecto al Mundial pasado, pasando de de 60.4 tiros de promedio a 70.5 en estos Juegos, de 18.8 triples lanzados a 29 en la actualidad, o de 13 asistencias de promedio a 17.5.

Argentina tiene todo para vencer a Japón, pero a no descuidarse y respetar el crecimiento de una selección que sabe a lo que juega, conoce sus virtudes y las explota al máximo.

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