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El mayor logro de la carrera de un jugador es un arma de doble filo para muchos deportistas. A varios les hace perder la motivación, pero a la Generación Dorada le sucedió lo contrario, con la mayoría de sus jugadores teniendo grandes rendimientos en la 04/05.

Sin dudas que el más destacado fue un Manu Ginóbili que logró su segundo anillo en la NBA con los Spurs. Con 16 puntos en la fase regular, explotó en los playoffs con 20.8 puntos, 5.8 rebotes y 4.2 asistencias, terminando segundo en las votaciones al MVP de las finales y con polémica.

En la misma NBA, Chapu Nocioni tuvo, quizás, la mejor temporada de un rookie argentino, con 8.4 puntos, 4.8 rebotes en fase regular y volviendo a llevar a los Bulls a los playoffs después de 6 años. Allí, subió su rendimiento a 12.8 puntos, 8.2 recobres y 2.3 asistencias cayendo en primera ronda.

Quien sufrió el primer año en la mejor liga del mundo fue Carlos Delfino. Con poco lugar en los Detroit, las discusiones que tuvo con Larry Brown lo dejaron afuera del equipo de playoffs que llegó hasta las finales ante San Antonio.

En Europa, Walter Herrmann y Pepe Sánchez se destacaron el la ACB, quedándose con la edición de la Copa del Rey y llegando a semis de la liga. En esa misma competencia española, Luis Scola consiguió ser el MVP de la temporada con Tau Cerámica.

La 2004/05 fue la explosión definitiva del interno argentino. Fue elegido tres veces Jugador de la Semana, fue elegido el mejor en febrero, Quinteto ideal y el MVP de la competencia. En 46 partidos promedió 18 puntos, 6.7 rebotes y 2.2 asistencias por encuentro. Ante Manresa realizó quizás su mejor encuentro a nivel clubes, con 33 puntos, 17 rebotes, 5 asistencias y 3 robos.

A su vez, Fabricio Oberto tuvo sus mejores números en la ACB con 14.2 puntos y 7.3 rebotes, pero junto a Ale Montecchia perdieron en semifinales de la Copa ULEB y se quedaron sin playoffs en la liga. A su vez, Gabriel Fernández explotó por completo en Lleida con 16 puntos y 3.5 rebotes.

En Italia, por su parte, Hugo Sconochini firmó en Virtus Roma y ayudó con 8.2 puntos y 4 rebotes para llevar al equipo a semis de la Lega, cayendo por 3-2 frente a Bologna. El último en el Viejo Continente fue Rubén Wolkowyski, que se convirtió en la primera figura que llegó al Khimki de Rusia y lo ayudó a ser protagonista.

Por último, Leo Gutiérrez dominó por completo la Liga Nacional. Con Ben Hur fue campeón de la competencia argentina y el campeón olímpico fue MVP de la fase regular y de la final, con 18.9 puntos, 6.1 rebotes y 1.7 asistencias en 55 partidos.