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España

Tomás Lamas: el heredero crece

15:48 17/04/2023 | El hijo de Julio está en España como asistente de San Pablo Burgos tras dos temporadas en Japón, buscando el ascenso.

Tomás Lamas en el momento que conoció a Pedro Sánchez, presidente de España y fan del básquet

Tomás es hijo del exentrenador Julio Lamas pero está escribiendo su propia historia como entrenador: hace tres años vive en el extranjero y está construyendo su carrera como asistente. Primero partió a Japón, de la mano de Facundo Muller, para sumar dos años de experiencia en la tercera división de dicho país y hace unas semanas, armó las valijas y se fue a España para sumarse a San Pablo Burgos de la LEB Oro.

Dialogamos con él para conocer su actualidad, cómo está viviendo esta nueva experiencia, como viene siendo su trabajo y como fue el hecho de poder conocer a Pedro Sánchez, el Presidente de España que visitó al San Pablo Burgos recientemente.

- ¿Cómo estás viviendo esta nueva experiencia en España y cómo se dio este salto a San Pablo Burgos, un club de mayor jerarquía, una competencia más importante?
- Me sumé hace cuatro partidos a San Pablo Burgos. Tuvieron un cambio de entrenador, cuando viene Curro Segura le recomendaron mi nombre y él hizo toda la gestión para que yo me sumase. Vengo porque fue idea de él, pero obviamente es el club el que me trae, pero por pedido de él. La experiencia está siendo buena, es una liga nueva para mi, que tiene mucho nivel de jugadores, sobre todo los equipos que tienen pretensiones de subir tienen mucho nivel de entrenadores, de jugadores, de estructura. Así que está siendo un poco de aprendizaje y un poco de ayudar a Curro en lo que más pueda.

- ¿Cómo repasás los dos años en Japón? Juego, cultura, adaptación.
- Fue linda. Estuve dos temporadas, fui con pandemia. Vivir en una cultura totalmente distinta a la argentina y a cualquier cultura que se parezca a la argentina, me hizo ver cosas distintas que siempre está bueno. Me sirvió en lo personal. Después, la adaptación no es lo mismo adaptarse a Japón que a España pero estuvo bueno, ver algo distinto y experimentar algo distinto. Desde lo profesional, es una liga que está desarrollándose pero es muy fuerte económicamente. Eso me permitió trabajar una temporada con Facundo Muller, que es uno de los mejores entrenadores de la Liga y con Andrej Lemanis, quien fue 10 años de la selección de Australia y dirigió Mundial, Juegos Olímpicos, dirigió jugadores NBA, eso se puede dar porque el equipo japonés tiene el dinero para llevarlo, eso me permitió trabajar con dos entrenadores top.

- ¿Cómo analizás tu crecimiento en tu corta carrera como entrenador?
- Como te comentaba, tuve suerte de manera rápida y tempranamente de empezar a trabajar con entrenadores muy buenos y en otros países, lo cual tiene un plus. En los últimos tres años trabajé con Facundo Muller, Andrej Lemanis y ahora con Curro Segura. Los tres tienen experiencia internacional, en selecciones, en distintos países, para mi experiencia personal poder combinar tres escuelas tan buenas como la española, la australiana y la argentina que son tan diversas entre sí, me hizo crecer.

- ¿Cuáles son tus objetivos a corto, medio y largo plazo?
- Mis objetivos van de la mano con el equipo por ahora. El corto, es tratar de ir a la ACB, es para lo que está el equipo y es el objetivo planteado cuando arrancó la temporada. Después, ver. Ya mediano y largo no es tan claro como el objetivo a corto es tan importante, tengo la cabeza puesta en eso. Faltan los últimos cinco partidos de serie regular, playoffs y una posible Final Four. Por ahora tengo la cabeza puesta ahí, la vuelta a la ACB de San Pablo Burgos es algo muy importante.

- ¿Cómo es la relación con tu papá y tu trabajo, siendo uno de los grandes referentes de Argentina y el mundo?
- La relación con mi papá siempre fue de mucha cercanía. Ahora lo sigue siendo, aunque con un poco de distancia durante las últimas tres temporadas, pero siempre hablando, él está siempre pendiente. Siempre la relación más importante fue padre-hijo, igual que cualquier otra y es la que siempre estuvo. No lo analizo como que fuese un entrenador. Es un buen padre y eso es lo más importante. Siempre se para desde la posición de padre para hablarme. Tenemos muchas charlas de básquet. Él ve casi siempre los partidos y me dice lo que piensa y está bueno, tengo un entrenador de muy buen nivel siempre mirando y dándome su opinión y gratis (risas), obviamente que lo escucho y lo valoro.

- Recientemente pudiste conocer a Pedro Sánchez, presidente de España, ¿cómo viviste esa experiencia?
- Estuvo bien. No tengo ninguna apreciación política porque no lo conozco y tampoco me metería. Nos habían dicho que era muy aficionado al básquet, que había jugado hasta la primera local de Estudiantes de Madrid y que justo estaba haciendo una campaña en Burgos y le gustaría venir a saludar. Así que vino después de un entrenamiento y estuvo con nosotros hablando de básquet, un poco de todo, nos preguntó los nombres, de dónde éramos, nos saludamos, nos sacamos una foto y se fue. Siempre llama la atención estar con un Presidente de un país por la investidura que tiene, pero fue solo eso, nos saludó, se sacó una foto, hablamos un poco de básquet y se fue.

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