Euroliga 2015/16

Teodosic mató a los fantasmas: ¡CSKA campeón!

17:34 15/05/2016 | Con una clase de básquet, le sacó 20 en la primera mitad (50-30) pero después se durmió y lo definió recién en suplementario 101-96.

Séptimo título europeo para el CSKA. (foto: Euroliga)

CSKA 101 - Fenerbahce 96

Una final mental. Así se definía el choque para consagrar al campeón de la Euroliga 2015/16. Más que lo táctico, la cabeza. Y la que mejor funcionó terminó siendo la del CSKA, aunque los fantasmas se pasearon gigantes por el MB Arena de Berlín, cuando luego de sacar 21 de luz, los rusos terminaron en suplementario tras una épica remontada del Fenerbahce.

Obradovic arrancó con Kalinic de titular para mandarlo sobre el MVP De Colo y sacarlo del juego con agresividad física y también para postearlo ante un rival más pequeño (De Colo, Higgins), pero el alero se puso en 2 faltas a los 4 minutos y la estrategia no funcionó. Igual, Itoudis largó rápido a la cancha a Teodosic, en un inicio con Datome decisivo (6 puntos) y con tanteador muy cambiante, con alta efectividad, algo no esperado.

La otra tarea era clave: Fenerbahce presionando mucho la bola en manos de los bases rivales; CSKA tratando de no permitir que el balón llegara cerca del cesto, negando o doblando llegado el caso. Con Teodosic, CSKA ganó juego ofensivo y tamaño y se despegó 5 puntos (20-15), diferencia que era (fue) nada. El CSKA terminó yéndose adelante apenas 22-20 al final del período.

Fenerbahce siguió apostando al juego físico pensando que así terminaría sacando rédito, quizá no al instante. Al menos, cargaba de faltas a su rival. Pero no todos entendían el mensaje de Zeljko, o eso parecía. CSKA lucía más convencido de lo que quería hacer y dejaba el control en la dupla De Colo-Teodosic, ante un rival que no tenía tan claro quién llevaba la voz de mando, ante la salida por descanso de Datome.

CSKA tomó confianza, la palabra clave de la noche, sobre todo porque Teodosic estaba enfocado (10 puntos), y esa parecía una combinación explosiva para Fenerbahce, que no tenía en sus grandes la decisión ni la actitud para ir a ganar la lucha que más los favorecía. Principalmente Udoh. Los rusos sacaron 20 (50-30), con un control total del juego. 

Fenerbahce necesitaba salir a matar en el arranque del tercero si quería tener chances, pero se quedó en un tibio intento. De hecho, CSKA llegó a elevar la diferencia a 21 (53-32), mientras Vesely paseaba su frustración a partir de una noche horrible, básicamente desde la línea de libres (¡empezó 0/9!). 

Tal era la impotencia que hasta casi se arma una entre el público millonario ruso y turco, cuando Kalinic fue empujado por un ruso al que se le fue encima tras un empujón. No era otra cosa que energía a descargar por algún lado. CSKA pasó el rato, sin grandes complicaciones, más allá de no poder repetir la clase de la primera mitad. El juego se hizo más brusco y friccionado, pero con una defensa magistral (como en todo el juego), los rusos mantuvieron el control, y se fueron al último descanso 16 arriba (69-53).

Recién ahí pareció darse cuenta el equipo turco que el título se le iba. Udoh despertó de su letargo ofensivo con 2 volcadas, Antic clavó un par de tiros lejanos y, aprovechando algunos errores del CSKA, se puso por primera vez en un dígito de diferencia después de mucho tiempo (74-66) a 5:42 del final. Khryapa levantó el primer golpe con una bomba, pero después, entre Datome y la efectividad de Antic desde la línea por buenas defensas que terminaron en faltas del CSKA, se estrechó el margen a 6 (77-71). 

CSKA estaba ante su prueba de fuego: matar a los fantasmas de los últimos 4 años. Una bomba y un doble de Dixon los puso al límite: 79-78 con muchísimo tiempo por delante (1:52), y muchos problemas de faltas (5 Vorontsevich, 4 De Colo, 4 Teodosic). Fenerbahce tuvo dos chances en manos de Udoh para pasar al frente, pero el nigeriano equivocó en ambas el camino. Teodosic, en la siguiente, descomprimió el parcial de 36-16 de los turcos, dándole una asistencia genial a De Colo para el 81-78 (-49s6).

No se podía respirar en el estadio, ahora otra vez copado por las gruesas voces turcas. Y menos cuando Dixon clavó otro bombazo a los 6 segundos de posesión para empatar en 81 (-43s). De Colo se olvidó el MVP en el hotel, porque tomó 2 decisiones pésimas. Primero forzó y perdió el balón, dándole 2 libres a Sloukas, que puso al frente al Fenerbahce 73-71, y luego tomando un tiro malísimo, salvado por Khryapa, que mandó el juego a suplementario.

La cara del general manager del CSKA, Andrey Vatutin, tan relajada media hora antes, lo decía todo. Estaba sucediendo de nuevo. Sloukas clavó un triple de entrada como para enterrar a los rusos, pero evidentemente supieron tomarse la situación con menos dramatismo del esperado. Volvió De Colo a ser el MVP, Teodosic a controlar el ritmo, y todos a defender. Metió un parcial de 8-2 y sacó 3 a 2:10 del final, tras un golazo del francés. 

Fenerbahce acertó una, pero luego empezó a equivocarse. Y el CSKA lo aprovechó para ir sentenciando desde la línea, con De Colo. Se fue 7 adelante (97-90), con 38s9, pero Dixon otra vez le dio vida a los suyos con una bomba (97-93), a 29s9 del cierre. Y no se pudo relajar nunca el equipo ruso, porque tras dos libres de De Colo, vino un triple de Datome (99-96), y entonces sí, el francés metió otros 2 para liquidarlo (10 puntos en el alargue). Los fantasmas desaparecieron de golpe y el CSKA se coronó campeón 101-96 en una de las definiciones más apasionantes de los últimos años.

Los rusos obtienen su séptimo título de Europa, pero el primero desde el 2008, luego de acceder a las últimas 4 Final Four y caer en todos siendo favoritos. Era el gran peso de Teodosic, el serbio que había fichado para ser campeón. Ahora Milos puede festejar. En la séptima (otras 2 con Olympiacos) se le dio.

Fabián García / [email protected]
Enviado especial al F4 de la Euroliga a Berlín (Alemania)
En Twitter: @basquetplus

 


 

Compartir