ACB 2017/18

Patricio Garino: "No tengo apuro en pegar ningún salto"

18:30 08/05/2018 | Hablamos con Patricio Garino en Vitoria, sobre su adaptación al básquet europeo, el cambio de entrenador y la selección.

Seguimos recorriendo Europa con los argentinos que juegan en las principales ligas. En esta oportunidad, Patricio Garino, que habló de la salida de Prigioni, su sistema, el de Pedro Martínez y su adaptación a lo que es la ACB y la Euroliga.

-¿Cómo estás manejando esta primera experiencia en Europa?

. Una temporada muy distinta en todo sentido. Sabía que iba a ser una temporada nueva para mi, en el estilo de vida, en el juego, en la cultura, es algo que yo me había olvidado. Se agregaron más factores que lo hicieron distinto, así que está siendo una montaña rusa de emociones, de partidos, de sensaciones pero siempre tratando de rescatar lo positivo y aprendiendo todos los días.

 

-¿Cómo fue para Luca y para vos el cambio de no tener más a Pablo Prigioni, alguien que conoce lo que es para un argentino adaptarse?

. Fue complicado. Los dos estabamos con Pablo y con Carlos (Delfino) al mismo tiempo y nos ayudó un montón, ellos pasaron por esta situación un montón de veces, vieron pasar esto a un montón de jugadores y nos hicieron la vida mucho más fácil. La verdad que ese cambio rotundo nos pegó muy fuerte, es algo que no nos esperabamos. Ninguno acá en el equipo. Nos pegó, no solo a nosotros, sino al conjunto. Le tomamos mucho aprecio a Pablo, ya con la reputación que tiene, no solo en la Argentina sino acá en Vitoria como leyenda y saber que las cosas no le funcionaron ni a él ni al equipo nos puso muy mal a todos. Fue una situación muy fea y creo que se notó el aprecio que le tomaron los jugadores cuando intentamos que se quede. Con el nuevo entrenador fue otra adaptación a Europa y a España.

 

-¿Cúal es tu opinión sobre el sistema de juego de Pablo y por qué creés que no funcionó o no tuvo tiempo de funcionar?

. El básquet se está transformando en eso, se puede ver más que nada en equipos NBA, lo tenía un poco más aceitado, digamos. Los equipos top de Europa lo vienen utilizando hace un par de temporadas. Es distinto y capáz algunos lo ven como algo negativo porque no están acostumbrados, la gente tiende a rechazar lo nuevo hasta que no lo conoce. No creo que haya sido erroneo, es un sistema muy simple, dinámico, que hace que el básquet sea más llamativo, los jugadores se sientan más confiados, más importantes, protagonistas porque hay movimiento constante. Creo que lo que pasó es que la gente no se da cuenta o no sabe lo que pasa atrás del telón, el equipo llegó con muchos jugadores lesionados y el grupo se junto dos semanas antes de que empiece el torneo. Cambiar un sistema donde los jugadores están acostumbrados a otra cosa no pasa de un día para el otro. Hablando con Pablo deciamos que no iba a a ser algo que se podía cambiar en tres o cuatro partidos, es un proceso de una temporada entera. El tenía pensado jugar el mejor básquet en enero o febrero pero al mismo tiempo eramos consientes que había que ganar con un sistema u otro, no se pudo. Eso lo afectó mucho a Pablo y como es una una persona con mucho caracter no quiso seguir perjudicando al equipo y dio un paso al costado.

 

-¿Faltaba mucho para que estuviera aceitado?

. Si, faltaba mucho la verdad. El equipo en si, no nos conociamos los propios jugadores, si bien la química fuera de la cancha la teníamos. Pero adentro de la cancha no era lo mismo, son estilos distintos, yo no conocia a la mitad del equipo ni un partido entero. Como equipo no estabamos preparados para asimilar el sistema al cien por ciento.

 

-¿Fue más fácil para vos adaptarte y tener más minutos con Pedro por tu modo de juego?

. La verdad que no. Fui un desconocido para él. Me lo reconoció, no me conocía ni yo a él así que empezamos desde cero. Para mi fue más dificil porque estaba lesionado y no pude demostrar lo que era como jugador ni en los entrenamientos. Así que la adaptación entre ambos fue bastante dificil, fue una fustración continua de los dos lados. Yo le quería dar el máximo y Pedro no estaba recibiendo lo que se supone que tenía que recibir de mi mismo. Es muy exigente y se lo ve en la cancha, tiene un sistema que es pieza por pieza, quiere que esté todo en orden y me costó bastante por estas distintas situaciones. Nos costó adaptarnos como equipo pero tuvimos muy buenos momentos.

 

-¿Cómo te adaptaste una vez que estuviste al 100%?

. Complicado. Creo que al cien por ciento todavía no llegué. Cuando pude jugar dos partidos para Pedro me fracturé la mandibula y estuve dos meses afuera que me hizo sufrir bastante. Recíen pude volver en enero y estaba para atrás. No era el jugador que conocen, el Pato que puede defender, que tiene piernas, que penetra. Estaba totalmente perdido y creo que recíen en abril volví a ser un poco lo que era y hasta el día de hoy tengo mis altibajos de una temporada muy dura emocianal y físicamente. Sé que esta temporada no va a ser la mejor de mi carrera pero voy a hacer lo posible para que sea siempre en lo más alto.

 

¿Cómo cambió la situación con Pedro cuando estuviste bien, ya que sos un jugador perfecto para él?

. Si, cambió cuando estube bien y pude desmotrarle lo que él quería adentro de la cancha. La verdad que beneficia mucho la defensa y sus equipos se basan en ello. Así que una vez que pude adaptarme al sistema y entrar en el grupo, la relación cambió mucho. Fue muy exigente conmigo, no me conocía, me estaba probando. Hubo un montón de partidos que no jugué, partidos que no me cambié, viajes que no hice. Fueron distintos métodos que usaba para motivarme, conocerme y cuando pude demostrar un poco lo que era, creció mucho la confianza y se dio cuenta que le puedo dar mucho al equipo, en esa parte de energia, de intensidad, de defensa. Hoy por hoy la relación es totalmente distinta.

 

-¿Qué cambió en los jugadores para que haya un vuelco tan positivo?

. No creo que haya cambiado mucho. En parte de jugadores, química, equipo es lo mismo. Lo que trajo Pedro fue un sistema que ya se conocía, que estabamos acostumbrados, fue todo tiempo. No es que llegó y hizo magia. Uno se pone a pensar y la Copa del Rey, que teníamos chances de estar en lo más alto, la perdimos en la primera ronda con el sistema de Pedro ya instalado. Hasta que nos incorporamos al sistema de Pedro fue recien febrero y ahí llegamos a nuestro mejor nivel. Pero antes de eso tuvimos partidos maravillosos de ganarle a los mejores equipos o partidos de apenas ganarle a los de abajo, es un tiempo de evolución.

 

-¿Te afectó en algo el nuevo formato de la Euroliga y la gran cantidad de partidos?

. Al principio me sotó mucho más. Con el correr de los partidos y los viajes uno se va aclimatando, se va acomodando a lo que es este sistema. Hoy para nosotros la Euroliga se terminó por lo que estamos plenamente con la ACB pero fue más dificil de lo que esperaba, más que nada en ACB. Creo que el nivel de Euroliga, con euqipos top, con los mejores jugadores es un juego más dinámico, más físico. Me costó mucho menos esa adaptación por lo que ya estaba acostumbrado a jugar. La ACB es muy complicada para nosotros, los equipos de Euroliga que jugamos hasta cuatro partidos por semana, enfrentar a un equipo que tuvo una semana para prepararse contra vos, jugadores frescos, llenos de energia, con scouting de todas tus jugadas. Vos capáz llegaste la noche anterior y miraste diez minutos de video para salir a la cancha. Ese cambio a mi me sorprendió, no pensé que la ACB iba a tener este nivel que estoy viendo. Pensé que iba a ser un paso menor, se podría casi que igualar a la Euroliga. Esos factores de energia, descanso, scouting, se nota mucho en la cancha.

 

-¿Qué te costó más en la parte deportiva?

. Me costó más que nada lo físico. Creo que al principio mi forma de juego, hasta conseguirme un nombre, me costó mucho, me llenaba de faltas en pocos minutos porque soy un jugador muy pegado y la gente de acá no estaba acostumbrado a eso. Eso me llevó un tiempo. En Euroliga volver al ritmo habitual, constante, muy rápido, muy fuerte y eso fue para mi acostumbrarme a lo que era antes por las lesiones. En ACB hasta el día de hoy me estoy tratando de adaptar.

 

-¿Esto es más parecido a la universidad?

. No, la ACB es distinto a todo. En la NCAA el nivel no será tan alto pero el estilo es más parecido a la Euroliga y D LEague y NBA ni hablar. En ACB era el cambio más grande que iba a tener, es estrictamente juego FIBA, muy físico y son situaciones que no estoy acostumbrado por mi formación.

 

-¿Qué es lo que más te sorprendió, ya sea de lo organizativo, Baskonia o algún jugador?

. La sorpresa fue de ver tantos jugadores con mucho calibre en Euroliga y en ACB. Jugadores con trayectoria en NBA, o con mucha historia y uno no se lo espera cuando habla de ACB piensa en España, pero hay jugadores de toda Europa que vienen acá porque es la mejor del continente. No sé si hubo un jugador pero el nivel de muchos a uno lo sorprende, jugarlo no es lo mismo que mirarlo por la televisión.

 

-¿En Euroliga?

. Los viajes. Lo que hablan todos, los viajes a Rusia y Turquía son ambientes totalmente distintos a lo que uno conoce. Es muy distinto conocer esas culturas, esa gente. El estilo de juego puede ser porque hay muchos jugadores extranjeros y es más parecido a la NBA. Pero ya decir que hice esos viajes y estuve ahí fue algo muy lindo.

 

-¿Hay alguna parte de tu juego que le tenés que prestar más atención desde tu llegada?

. No, nada nuevo. Es lo de siempre que uno trata de evolucionar año a año y creo que mi juego siempre se va a basar en el control del balón, el tiro de tres puntos. Después cada uno va trabajando en distintos fuertes, ya la defensa viene siendo mi marca registrada, la intensidad y siempre hay que mantenerlo. Pero no ha surgido nada nuevo que tenga que focalizarme sino que hay que tratar de conocerse a uno mismo, saber las fuerzas y debilidades y trabajarlas.

 

-Luca me dacía que era muy dificil estar seis minutos seguidos en gran nivel

. Si, es así. Es muy raro ver a un jugador con más de treinta minutos por partido. Los jugadores estrella capáz lo hacen pero es muy dificil mantener un nivel de intensidad tan alto en defensa y en ataque. Yo sé que si llego a mi límite de 25 minutos voy a tener que hacer un esfuerzo gigante o voy a estar muy cansado al otro día porque sé que los 25 minutos son los que puedo estar al cien por ciento adentro de la cancha. Terminas muerto, con Luca a veces hablamos por señas porque no tenemos aire.

 

-¿Cúal es tu idea a futuro?

. Tengo dos años más acá en Baskonia. Así que estoy enfocándome en eso porque me vendría muy bien estar dos años en un equipo de mucho renombre. Muchos jugadores pegan el salto desde acá, tienen los contactos, el sistema adecuado, esta lleno de scouts de la NBA a todo momento. Mi concentración esta a pleno en Europa, no tengo apuro de pegar ningún salto, quiero formarme bien como jugador y pegar el salto acá en Baskonia.

 

-¿Qué sentiste con los partidos de la selección y que sentís ahora que podrías estar?

. Fue muy dificil. Mucha fustración, mucha ansiedad. Estuvimos en pleno contacto en los partidos con Facu porque no aguantabamos no poder estar presentes. Es un tema muy delicado con este sistema de las ventanas de FIBA con Euroliga y NBA. Es un sistema raro que nos perjudica, estamos desesperados por poder volver a estar con la selección. Se sufrió, más que nada el partido con Uruguay, saber que uno no puede ayudar al equipo para ganar nos dolió mucho. Estamos con ganas de volver porque sabemos que esta vuelta en Montevideo va a ser un partido clave para nosotros, la clasificación a la segunda ronda así que con mucha ansiedad de estar presentes.

 

-¿Este sistema no es tan facil como parece?

. No es tan facil como parece. No es el pensamiento de decir estamos primeros, segundos y estamos adentro. Es totalmente lo contrario, queda la segunda ronda, queda Estados Unidos, México, Puerto Rico o el equipo que clasifique. Mismo Uruguay o Panamá son equipos fuertes y no es facil para las selecciones tener jugadores en sus clubes y juntarse unos días antes, preparar un partido de semejante importancia, viajar, jugar. Te puede beneficiar como te puede perjudicar en cualquier momento

 

-¿Para ustedes sería mejor que se solucione o no este tema por los viajes que tendrían que hacer en la temporada?

. Es complicado de hablar, cada jugador tiene su opinión. Puede que un jugador no quiera viajar por ese sentido, son 15 horas de ida y 15 de vuelta en una temporada de 80 partidos y es un desgaste increible pero al mismo tiempo hay sentimientos encontrados. La selección para nosotros es siempre la prioridad pero nuestro contrato es con el club de Europa. Lo ideal sería que se llegue a un acuerdo para manejar los tiempos y pensar en los jugadores que son los más perjudicados. El desgaste no implica bajar el nivel, lo ideal sería bajar un poco la temporada y que haya un arreglo para viajar. Pero va a llevar tiempo porque son muchos hilos distintos.

 

Por Fabián García (Enviado especial a Vitoria, España)
@basquetplus

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