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La ausencia de Federico Marín ha sido una de las constantes del plantel de Quilmes. El alero no juega desde el 11 de enero, después de que el Cervecero realice una travesía de visitante por Formosa y Corrientes, regresó a Mar del Plata con dolores lumbares y los mismos impidieron que vuelva a sumar minutos en el equipo. En este momento ya lleva casi dos meses inactivo, pero de a poco va evolucionando en su dolencia.

Al nacido en San Justo se le diagnosticó una hernia de disco, tendrá aproximadamente un mes más de recuperación pero el propio jugador conserva esperanzas de volver antes. Con ansias de retornar al trabajo con sus compañeros, Marín habló con Básquet Plus y contó los detalles de su lesión.

- ¿Cómo estás de los dolores lumbares y para cuánto tiempo de recuperación tenés?
- Tengo una hernia de disco, entre la lumbar cinco y el sacro uno. Según lo diagnosticado tengo para un mes de tratamiento, así que esperemos que después de eso ya pueda estar jugando de nuevo con el equipo.

- Hoy una pequeña lesión te saca de la cancha por un par de partidos, en tu caso no sé si será una sensación pero, como la dolencia es más grande y difícil de ponerle lapsos de rehabilitación, la cantidad de juegos parece ser mucha. ¿Hubo algún de tipo de retraso en la rehabilitación o está dentro de los planos pautados?
- No, pasa que teníamos dos opciones. Una era hacer una recuperación algo activa, con kinesiología y otros trabajos, combinándolos con trote y lanzamientos al aro. La idea era que para cuando me recuperara no esté tan crudo, pero evidentemente ese tipo de recuperación no me resultó y esta lesión ya hizo que me pierda muchos partidos. Hace unos días me vio un especialista, me dijo que pare y que no haga actividad por un mes. Ahora llevo una semana así, y en los próximos días seguramente arrancaré con algunos trabajos tranquilos. Cuando me lesioné mi pensamiento era poder volver en dos semanas, pero un médico amigo me contó que la hernia de disco te puede llevar hasta tres meses, mis expectativas eran regresar en unos días pero no es tan así. Aparte no es como un desgarro que tenés un tiempo más preciso, acá el médico me dijo que me puede llevar un mes si estoy bien o hasta tres meses en el peor de los casos.

- Pasa que es una lesión que también depende mucho de cómo vengas en el día a día…
- Exacto, había días que me sentía bien cuando trotaba, y capaz que al otro día me sentía un poco más molesto, paraba pero después al día siguiente me sentía bien… Quizás todo eso me retrasó un poco, porque pensaba que al estar bien estaba volviendo y evidentemente no era así. Ojalá que de acá a 15 días me sienta bárbaro y no llegue al mes que me dijo el doctor.

- Venían con una actividad constante antes de tu parate, ¿La lesión se te produce por la carga de partidos y los viajes o acusa más a algo que podía pasar en cualquier momento? ¿Lo creés como algo causal o casual?
- Puede ser por cualquiera de las dos cosas. Posiblemente me pudiera haber pasado en cualquier momento, pero también creo que pudo haber sido esa seguidilla de partidos y los viajes. Hace tres meses atrás tuve un golpe en la espalda en un partido contra Boca, quedé duro pero seguí jugando porque hay momentos en que te aguantás y seguís. Pero después esa noche fuimos a Bahía Blanca y Junín, en ambos jugué con molestias y después tuve que parar porque no podía más del dolor. Quizás con otro calendario después del partido con Boca hubiese tenido más días de descanso y me habría permitido llegar bien a los otros partidos.

- Y debe ser muy difícil frenar, si podés jugar lo vas a hacer, todo por no dejar al equipo algo muleto.
- Personalmente me cuesta mucho parar, y ver los partidos desde afuera te hace sufrir mucho. Ahora no podés relajarte y tener muchos días para entrenar diferenciado, y yo quiero estar y jugar en todos los partidos. Ahora quizás te golpeás y tenés que estar viajando esa misma noche para jugar 48 horas después otro partido, pero son cosas en las que seguramente se va a trabajar.

- ¿Cómo toma el equipo esta recuperación que estás teniendo?
- La verdad es que todo el grupo me hace el aguante y Lea (Ramella) ya habló conmigo para pedirme que me quede tranquilo. Leandro me dio mucho respaldo, sé que puedo contar con él porque ya tuve otras situaciones en las que me lo demostró, me bancó en situaciones que no justamente eran deportivas sino personales y soy un agradecido. No solo Lea y el grupo me apoyan, sino que también la dirigencia del club se ha portado muy bien conmigo. Me genera incomodidad el saber que no tengo un lapso fijo para volver, porque se puede producir incertidumbre, pero al menos tengo la esperanza de volver en un mes como mucho. Como te decía, ojalá que la próxima semana ya esté mucho mejor y pueda regresar antes.

Lucas Leiva / [email protected]
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