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Facundo Campazzo es uno de los jugadores más espectaculares a nivel FIBA. También dejó demostrado su talento en el Mundial de China 2019 y estuvo a un partido de ser campeón en aquel torneo. Verticalidad, manejo de los ritmos, asistencias, agresividad, personalidad, intensidad y eficiencia son las especialidades que lo diferencian del resto.  

En la NBA no hay muchos jugadores con sus características puntuales en relación con su altura (1.80 metros) y eso lo hace aún más particular. Enfocando el sentido en esa comparación, en Básquet Plus decidimos hacer un paralelismo entre dos jugadores de la liga norteamericana que se le parezcan, uno en ataque y otro en defensa.  

En ataque, por centímetros y estadísticas puntuales no hay otro más similar a Campazzo que J.J. Barea, el base de Dallas Mavericks. El de Puerto Rico no contó con muchos minutos esta temporada debido a una serie de lesiones, pero en su tiempo en cancha siempre demostró ser capaz de cambiar los ritmos, aportando gol y conducción desde la segunda unidad.  

En números el boricua promedia 7.5 puntos, 1.8 rebotes 3.8 asistencias, que no están alejando de los del cordobés, quien en la última campaña tuvo cifras de 10.0 puntos, 2.6 rebotes y 6.3 asistencias. Una estadística clave en la que son iguales es en el ratio de asistencias/pérdidas, ya que ambos tuvieron un índice de 2.8 en la 2019/20. Junto con ello, también estuvieron similar en porcentaje de uso, puesto que el de Real Madrid tuvo un 22.8% y el de Dallas un 24.5%.  

Con respecto al lanzamiento también son parecidos. En triples el argentino tiró al 38.3% y el puertorriqueño al 38.2%, mientras que de campo el primero cerró la temporada con un 43.0% y el segundo se mantiene a un 41.3%. Lo mismo en true shooting y tiros de campo efectivos, en donde el cordobés es un tanto mejor que el centroamericano: 60.6% en TS y 53.4% en eFG para Facundo y 51.9% en TS y 49.4% en eFG para Barea.  

En otros números no se parecen, en parte por el paralelismo del mundo NBA y FIBA, pero está claro que en otras sí. Acelerar a su antojo, atacar al grande en los cambios en las cortinas, lanzar con rango indefinido y castigar a través de la lectura son peculiaridades que ambos comparten, además de la altura.  

En defensa el base que se posiciona al lado de Campazzo por intensidad, inteligencia y centímetros es Kyle Lowry, el veterano de Toronto Raptors. El especialista en molestar al armador rival y en conseguir faltas ofensivas compensa su falta de altura con movimiento de pies y lectura de juego para anticiparse a las acciones de quienes lo superan en múltiples aspectos físicos.  

Una estadística similar, que hay que tomar con pinzas porque tiene que ver más con el equipo que con el jugador en sí, es el rating defensivo, que para el argentino fue de 105.2 en la última temporada y para el yanqui de 105.0. También ambos son buenos asegurando el rebote defensivo, según los avalan sus guarismos (5.0 para Campazzo y 4.8 para Lowry), y robando balones (2.6 para Campazzo y 1.3 para Lowry).  

Comparaciones, no son más que eso, pero siempre sirven para contextualizar y medir a los intérpretes de diferentes situaciones. Uno está en Europa, los otros dos en Estados Unidos. ¿Se unirá el primero al universo del norte? Resta esperar, ser paciente y meditar acerca de lo que podrá pasar.