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A Cleveland se le había complicado de sobremanera un partido que parecía tener complicado. Sin embargo, el hecho de contar con LeBron James siempre te da una vida extra y esta no fue la ocasión: el alero tuvo dos jugadas salvadoras en los últimos segundos, incluyendo un triple ganador sobre la chicharra, para estampar el 98-95 final, con el que los Cavs tomaron ventaja de 3-2 sobre los Pacers.

Tras una primera mitad favorable para los Pacers (56-49), Cleveland jugó un gran tercer cuarto (32-17) para tomar la delantera. Los locales mantuvieron la ventaja de doble dígito durante buena parte del último parcial, pero se quedaron sin ofensiva en los últimos minutos y poco a poco, Indiana fue metiéndose en partido.

A tal punto reaccionaron los Pacers, que llegaron a empatar el partido y luego de una pérdida de LeBron, recuperaron la bola restando 26 segundos. Oladipo apostó por un aclarado y si bien inicialmente dejó atrás a la marca de James, la estrella de Cleveland se recuperó justo a tiempo para darle un tapón monumental, recuperando además el balón y pidiendo tiempo muerto. El resto pasará a la historia: recepción de LeBron en la reposición en campo contrario y mientras el reloj llegaba a 0, tremendo triple sobre la marca para darle la victoria a los suyos.

James no soló brilló en la definición, sino que además tuvo un partido casi perfecto con 44 puntos, 10 rebotes y 8 asistencias. El segundo mejor de Cleveland volvió a ser Kyle Korver con 19, mientras que por Indiana no alcanzaron los 22 de Domantas Sabonis.