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En el comienzo del partido se vio un trámite sumamente trabado, que en realidad, terminaría marcando prácticamente la totalidad del primer tiempo. Boca era más intenso en defensa que en otras ocasiones, realizando muchos cambios en la marca, sobre todo de Leiva y obligando a Peñarol a tomar tiros de bajos porcentajes en el perímetro. Igual, en ataque los de Córdoba sufrían una excesiva cantidad de pérdidas y así, tras cinco minutos, el marcador estaba igualado en 5.

Adrián Boccia tuvo un buen pasaje para adelantar a los marplatenses, pero el liderazgo no les duró demasiado. Salvo cuando podían correr en transición, Peñarol tenía serios problemas ofensivos y de a poco, Boca lo aprovechó. Fabián Ramírez Barrios se anotó con una interesante seguidilla y un triple de Pedro Calderón, de gran primer cuarto (5 puntos y 7 rebotes) hicieron que el Xeneize termine los primeros diez minutos con ventaja de 15 a 11.

Lo mejor de Peñarol en el primer tiempo se vio en el inicio del segundo parcial. Allí, primero utilizaron una corrida de 6-0 en su favor para pasar a ganar por 17 a 15 y obligar a Ronaldo Córdoba a pedir un tiempo muerto. A la salida del mismo, poco cambió; Luciano Massarelli, Franco Giorgetti y Gabriel Fernández tuvieron buenos ingresos desde el banco y el Milrayitas pasó a imponerse por 26 a 19.

A partir de ahí, el juego volvió a entrar en un tramo de muchas imprecisiones, defensas cerradas y bajos porcentajes. Boca volvió a estar efectivo atrás y en ataque sumaba desde la línea para recortar las distancias. Igual, Alejandro Diez convirtió un doble sobre la chicharra en la última jugada del período y con su anotación, los de Rivero entraron a los vestuarios ganando 32 a 27.

Peñarol arrastró lo que había sido su mejor cierre del segundo parcial al inicio del tercero, sacando una diferencia de ocho puntos con un par de bombas de Massarelli y Boccia. Igual, la separación no se mantuvo y rápidamente, la visita volvió a meterse de lleno en el juego. Clave en ese sentido fue la aparición de Isaac Sosa, con 7 puntos (4 libres y 1 triple) para igualar el resultado en 39.

El puertoriqueño, justamente ex Peñarol, siguió encendido y clavó otro triple ahora sobre los brazos extendidos de Leiva. Con su arma predilecta durante toda la temporada, el tiro de tres y otro buen momento de Pedro Calderón cerca del aro, Boca mantuvo su mejoría y pudo terminar el tercer cuarto adelante por 52 a 50.

Los primeros minutos del último período fueron los de quiebre. Allí Peñarol arrancó desconcentrado y muy impreciso y capitalinos no perdonaron. Ramírez Barrios y Jonatan Treise sumaron de tres y más tarde, un par de contragolpes terminaron de culminar una racha de 10-0, con la que el Xeneize tomó ventaja de 62 a 50.

Peñarol concentraba mucho de su juego en el poste bajo con Leiva, pero Boca hacía un buen trabajo, no sólo en la marca individual, sino también en las ayudas y más que nada, jugando siempre al límite de la falta, para no darle puntos fáciles al pivote y obligarlo a sumar desde la línea. Ramírez Barrios tuvo otro tramo decisivo en ataque, Sandes y Faggiano aportaron lo suyo y de esa forma, la visita se terminó llevando la victoria por 75 a 67.

Una vez más, Boca demuestra que por alguna razón, se siente más cómodo jugando fuera de casa que en el Luis Conde, ratificando esa situación contra un Peñarol al que ya había superado en este mismo estadio por 20 puntos en el mes de diciembre.

Peñarol (67): Alejandro Konsztadt 2, Martín Osimani 5, Adrián Boccia 18, Alejandro Diez 8 y Martín Leiva 7 (FI); Fabián Sahdi 0, Luciano Massarelli 13, Franco Giorgetti 8 y Gabriel Fernández 6. DT: Fernando Rivero.

Boca (75): Jonatan Treise 13, Isaac Sosa 10, Lucas Gargallo 5, Fabián Ramírez Barrios 14 y Pedro Calderón 15 (FI); Lucas Faggiano 11, Nicolás Copello 0, Axel Weigand 0, Matías Sandes 8 y Dillion Sneed 0. DT: Ronaldo Córdoba.

Parciales: 11-15, 32-27, 50-52 y 67-75.

Árbitros: Daniel Rodrigo y Mario Aluz.

Estadio: Polideportivo Islas Malvinas.