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Boca recuperó su buena imagen en Sunchales y venció a Libertad por 86-80. El equipo de Ronaldo Córdoba sumó una victoria importante en la ruta, ha ganado en cuatro de sus últimos cinco partidos en el calendario y todavía se ilusiona con seguir escalando puestos en la tabla del Sur de cara a los playoffs. No fue una noche de grandes luces para el Xeneize, pero en todo momento fue superior a su rival y en la mayor parte del tiempo llevó el dominio del marcador.

Isaac Sosa y Fabián Ramírez Barrios lideraron la ofensiva de Boca con 18 y 16 puntos respectivamente. Ambos fueron importantes en el inicio del partido y permitieron que Boca tomase una distancia considerable en el tanteador, mientras que en el resto del encuentro se dedicaron a realizar buenas apariciones para evitar que un Libertad inconsistente pero peligroso consiguiera dar vuelta la historia. En el local, Keyron Sheard (18), Alejandro Alloatti (15) y Bruno Barovero (14) arrimaron buenas labores pero no alcanzó para que los santafesinos pudieran sonreír.

Los triples de Sosa y un Boca muy enérgico tomaron un rol protagónico en el inicio del partido. Con el boricua fino desde los triples, más un Ramírez Barrios vertical y un buen trabajo colectivo en el rebote defensivo, el Xeneize golpeó primero y se distanció 15-4 en los primeros minutos. Libertad, sin respuestas para detener el tiro perimetral rival, arrancó muy tibio comparado con su rival y por eso Piccato no tardó en pedir su primer tiempo muerto.

La tendencia no cambió, Boca se mostró mucho más cómodo en el partido y poco a poco fue sacando mayores diferencias en el score. La brecha llegó a ser de once unidades a falta de cuatro minutos para el cierre, pero Libertad contrarrestó con algunos arrestos individuales de la dupla Sheard-Alloatti y así no permitió que Boca logre un quiebre rápido. A pesar de que tuvo pasajes inefectivos desde los triples, Boca terminó llevándose el primer episodio por un 26-18 claro.

El segundo capítulo empezó a cambiar la historia para los Tigres. El cuadro local emparejó las acciones, con un poco más equilibró la balanza y se aprovechó en la sequía de Boca para arrimarse. Con una ráfaga de Sheard, que fue creciendo con el correr de los minutos, los sunchalenses metieron una carrera de 13-5 y empataron el partido en un apretado 31-31. Alloatti y Barovero fueron otros de los grandes autores de la remontada de Libertad.

La paridad continuó y prácticamente no se sacaron diferencias. Aquella ventaja que había logrado Boca en su momento no volvió a hacerse presente, los extranjeros de Libertad permitieron mantener cierta paridad y un triple de Barovero puso al local abajo por tan solo un tanto (41-40). Sin embargo, entre Sandes y Ramírez Barrios la brecha para Boca se estiró a 46-40, aprovechándose de la pobre imagen colectiva que mostró Libertad.

Boca arrancó más fino el complemento pero Libertad no tardó en despertarse. Con una volcada de Toombs, la visita llegó a sacar diez tantos de diferencias en el inicio del tercer periodo (50-40), sin embargo apareció otra buena racha de los Tigres para reducir distancias y ponerse a tan solo tres tantos después de una nueva bomba de Sheard: 56-53. Libertad la peleó, con muchas deficiencias, pero Boca se escapó en los minutos finales hasta cerrar el tercer episodio 63-57 arriba de la mano de Sosa y Sandes.

El último capítulo volvió a mostrar un mejor inicio del anfitrión. Con Vildoza y Barovero como responsables de la ofensiva, el equipo de Piccato se puso nuevamente a tres unidades (63-60) y le metió presión a su rival. Pero el sprint de Libertad volvió a quedarse sin nafta cuando más acechaba a Boca, y sin esa brújula la visita se escapó gracias a una racha de puntos de Weigand, llegando a sacar ocho de distancia (73-65) a poco más de cuatro minutos para finalizar la historia.

Amén de que los Tigres volvieron a arrimarse con los arrestos de Sheard (de fantástico partido), Boca siguió manteniendo su ventaja amparándose en las fragilidades que exhibió Libertad en defensa. Un nuevo triple de Sosa y el predominio en los rebotes decisivos terminaron inclinando la balanza a favor del cuadro capitalino.

Si bien Hubalek puso a los santafesinos al borde de la remontada (80-76), Boca se adueñó del juego aéreo en el momento clave y recuperó dos pelotas fundamentales para ir enfriando el partido. Los de Córdoba tuvieron tranquilidad para definir la historia y con el final de 86-80 se concretó una nueva victoria para un Boca que regresó al triunfo y sigue buscando un buen cierre en la fase regular.