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A la hora de hacer balances, teniendo en cuenta las expectativas previas y los resultados conseguidos, probablemente nadie termine sacando un saldo más positivo que el de Gimnasia de Comodoro. Los dirigidos por Martín Villagrán encararon un año repleto de interrogantes, pero no solo se metieron en la Final Four del Súper 20, sino que además realizaron una muy buena Liga, se mostraron competitivos ante cualquier rival y sortearon con elegancia todo tipo de adversidades.

La 2017/18 fue una temporada diferente para los patagónicos, cortando con un proceso exitoso que incluyó la salida de referentes como Gonzalo García, Leonel Schattmann y Nicolás De Los Santos. Sin embargo, a la vez, también se apostó por una continuidad en la idea, dándole el mando del equipo a Martín Villagrán, quien ya venía trabajando como asistente de García, compartiendo una idea similar desde la propuesta. El resultado no pudo ser mejor: el DT debutante demostró estar completamente a la altura e incluso terminó siendo votado como el mejor entrenador de la campaña, por sus pares.

A su vez, Gimnasia no solamente tuvo que superar obstáculos ligadas al cambio presupuestario y a la salida de grandes figuras, sino también a diferentes situaciones que fue viviendo durante la Liga: tuvo un elevado número de salidas no deseadas (ya sea por lesión o por otras situaciones), incluyendo la de Shaquille Johnson, quien lideraba al equipo con 17,9 puntos de promedio. A pesar de esto, el Verde no flaqueó, mantuvo una regularidad y aún jugando con una ficha mayor menos, logró ser un equipo largo, en el que todos aportaban desde su rol.

Desde el juego, no hay dudas de que lo más importante de Gimnasia estuvo en el costado defensivo. Los de Comodoro fueron la cuarta mejor defensa de torneo, permitiendo apenas 104,5 puntos por cada 100 posesiones. Sobre todo a partir de la lesión de Johnson, su plantel entendió que para compensar la diferencia de talento individual con otros equipos, debían dar el 100% de sus posibilidades en defensa. Y así lo hicieron. Pocos equipos mostraron una intensidad tan sostenida como la de los patagónicos y eso les permitió terminar entre los ocho mejores del certamen.

Lo interesante para Gimnasia es que varios de sus hombres claves ya tienen contrato para la próxima Liga, incluyendo a Villagrán. En una competencia donde a los equipos sin tanta billetera se les complica mantener a sus figuras, este no es un detalle menor y no hace más que ilusionar a su público con una 2018/19 aún más positiva. Mientras tanto, la vara ha vuelto a quedar realmente alta.