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Bahía Basket 81 - Quilmes de Mar del Plata 76

Bahía trabajó mucho para vencer a un duro Quilmes / Básquet Plus

Bahía Basket se quedó con un triunfo trabajado y sufrido ante Quilmes para de esta forma arrancar el 2016 con una sonrisa. El elenco de Sebastián Ginóbili no tuvo una buena noche a pesar de manejar la ventaja la mayor parte del tiempo, cosechando una victoria por 81-76 ante un Cervecero que tuvo a Walter Baxley como principal estandarte (32 unidades). En el local, lo mejor pasó por Anthony Johnson, fundamental en el juego interior y goleador del equipo con 24 puntos.

El acertadísimo arranque de Enzo Ruiz impulsó a Quilmes en el arranque de la noche. El escolta santiagueño comenzó la noche con tres triples, dejando al Cervecero con ventaja de 13-6 y aguantando las embestidas de un Bahía que perdió terreno por no tener la misma puntería desde la zona exterior.

Pero Bahía comenzó a levantar de a poco, ayudado por cierta merma en el ataque rival y potenciado con su tridente de extranjeros compuesto por Levy, Ivanov y Johnson. Bahía se arrimó y quedó abajo por la mínima (15-14), una racha de Baxley buscó alejar a Quilmes pero sobre el cierre del parcial apareció un triple de Whelan que empardó la historia: 19-19 al culminar el primer capítulo.

Bahía se acomodó en el siguiente periodo, porque ya había encontrado una mayor regularidad en su tridente extranjero y porque Quilmes empezó a verse un poco más limitado. Lo del Cervecero fue intermitente, tuvo momentos donde solamente se limitó la producción de un Baxley bien controlado (Ruiz perdió algo de peso) y fuera de ello le faltaron ideas.

El equipo de Ginóbili fue un poco más inteligente a pesar de no poder sacar diferencias considerables, defendió mejor y supo maquillar algunos desempeños irregulares (como Redivo, que todavía no entraba en juego) con buenos pasajes de sus foráneos. Con Levy tomando un par de rebotes, pequeñas ráfagas de Ivanov y un gran cierre de Johnson, Bahía se fue al descanso largo con una buena brecha de seis unidades (35-29).

El dueño de casa no aceleró demasiado y Quilmes comenzó a reaparecer en las manos de Baxley. Bahía siguió teniendo réditos con Johnson y el laborioso Levy, mantuvo la delantera pero sus desatenciones permitieron que el Cervecero siempre se mantuviera con posibilidades. Es cierto que el local llegó a tomar una renta de once (47-36), pero se distrajo y el esfuerzo de Quilmes metió presión.

Los de Ramella encontraron los caminos en ataque, vulnerando la frágil defensa local y clavando una ráfaga de 14 a 5 para ponerse a tiro. Los triples de Maciel y Calvi, más algunas llegadas de Romero, Ruiz y Baxley, dejaron a Quilmes a tan solo un doble (52-50), independientemente de que Bahía cerró el tercer periodo con ventaja de 55-50.

Bahía tuvo una serie de imprecisiones en el arranque del último capítulo y Quilmes volvió a equiparar las acciones, desde las corridas de contragolpe y desde la intensidad de un Baxley clave para esa levantada. El Cervecero trabajó ante cierta displicencia local y empató en 59 a menos de siete minutos del final.

De todas formas, el anfitrión supo reaccionar y tras un tiempo muerto de Ginóbili encontró un triple más que importante en las manos de Levy. Bahía logró una ráfaga de tantos para trepar a un sobrio 69-62, Baxley (y un triple de Sansimoni) volvió a apretar pero siempre apareció una ofensiva productiva del dueño de casa para sostener su ventaja, aunque esta diferencia fuese muy leve.

Bahía sufrió hasta los últimos segundos, y terminó de destrabar el encuentro con una acertada bomba de Whelan a falta de 11s (81-76). Quilmes buscó un nuevo manotazo sobre el final, pero el dueño de casa lo controló y ayudado por los errores de la visita terminó cerrando la historia a su favor.

Lucas Leiva / [email protected]

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