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Desde que irrumpió la Liga Sudamericana en 1996 y luego la Liga de las Américas en 2007, Argentina fue protagonista central en la conquista de títulos a nivel internacional, que tenían antes como casi única posibilidad el Sudamericano o Panamericano de Clubes, torneos mucho más reducidos. 

Sin embargo, ese dominio argentino se cortó abruptamente en el año 2012, cuando Regatas Corrientes se coronó campeón de la Liga Sudamericana. Desde entonces, se han jugado 5 ediciones más de ese torneo y otras tantas de la LDA, con cero copas para los equipos argentinos. Varias veces estuvieron cerca, pero nunca terminaron ganando el título.

Si tomamos los años previos, la ecuación es totalmente distinta. Entre 1996 y 2011 se disputaron 16 Ligas Sudamericanas, de las cuales Argentina ganó a través de sus representantes 11 (68.8% del total). Ligas de las Américas, entre 2007/08 y 2010/11 fueron 4, de las cuales los argentinos se llevaron 3 (75.0%). En este último torneo, Argentina lleva 6 ediciones con las manos vacías, ganando 3 Brasil, 2 Venezuela y 1 México. Lo de la Sudamericana es más contundente: Brasil se llevó 4 y Venezuela 1 en este tramo de sequía argenta.

¿Qué pasó? Las teorías son muchas, y las conclusiones pocas. Algunos piensan que Brasil, México y Venezuela pusieron mucho más dinero en estos años (cierto), otros que la diferencia de fichas mayores puso desventaja a Argentina (cierto, aunque antes también existía esa diferencia), y también se ha dado muchas veces que los equipos clasificados argentinos llegaron a esas competencias sin los planteles que habían obtenido el mérito.

Probablemente la más aceptada es que, desde el nuevo formato de la Liga Nacional, con la cantidad de partidos que se juegan acá, los equipos llegan con un enorme desgaste y, normalmente, también con muchos lesionados. Ninguna opción 100% confirmable.

Este año, luego de la desilución del 2017, parece ser el indicado para que se corte la racha, porque San Lorenzo, probablemente con el mejor plantel desde que subió a la Liga Nacional hace dos temporadas, ya se metió en la F4, con serias chances además de organizarla. Y falta el otro cuadrangular semifinal, que también se disputará en Argentina (Corrientes), donde además estarán Regatas y Estudiantes de Concordia peleando para meterse en la definición. 

Sean uno, dos o tres los representantes argentinos, San Lorenzo aparece como favorito, más allá del poderío ya mostrado por Mogi, los mencionados Regatas y Estudiantes, o los otros dos participantes en Corrientes, Guaros y Baurú. Aunque para algunos no sea importante, perder por tantos años la supremacía continental le ha quitado algo de prestigio a la Liga, y esta es la oportunidad para volver a estar en la cima de la élite.