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Con el reloj marcando los últimos días antes de partir rumbo a México, los partidos de fogueo frente a Uruguay adquirieron relevancia para el cuerpo técnico de la Selección. Estos encuentros representaron una oportunidad perfecta para ajustar sus estrategias, afinar el desempeño, al mismo tiempo que permite evaluar el rendimiento colectivo en condiciones de competencia real. Los dos amistosos fueron un termómetro para medir el progreso y ajustar los detalles necesarios antes del desafío continental que se avecina.

Ya desde el primer día Argentina dejó en claro un estilo de juego agresivo e inteligente. Con una defensa sólida y alta presión sobre el traslado del balón, el equipo buscó constantemente dificultar el juego rival. Esta filosofía demostró ser efectiva y obligó a Uruguay a cometer errores ante la imposibilidad de superar una marca asfixiante. La mayor obtuvo una clara victoria por 84 a 27 con 13 puntos de Agostina Burani, 17 y 9 rebotes de Candela Gentinetta, Camila Suárez aportó otros 11 puntos, 6 rebotes, 4 recuperaciones y 3 asistencias. Florencia Chagas sumó otras 10 unidades.

En el segundo turno, el equipo nacional mantuvo la misma intensidad que demostró el viernes por la tarde. La buena precisión en los tiros y un alto goleo les brindó una ventaja significativa en el marcador, una situación que le permitió a Gregorio Martínez probar a todas sus jugadoras antes de definir las que representarán al país en la Americup 2023. Acordado por ambos cuerpos técnicos, se disputaron cinco cuartos de 10 minutos. Fue triunfo por 103-42 y con Julieta Mungo como máxima goleadora con 15 puntos, un poco más atrás estuvieron Florencia Chagas con 12, Camila Suarez y Brenda Fontana con 11 unidades cada una, y Macarena D´urso cerró con 10.