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Hacía tiempo que venía con la chance de saltar al extranjero para competir en una Liga dura, pero se venía postergando. Incluso en el 2001, su familia estuvo cerca de mudarse aquí, pero tampoco se dio. Hablamos de Lucas Goldenberg, el alero que hasta el año pasado jugó la Liga Nacional, básicamente en Sionista (donde debutó) y Platense, y que a los 29 años fichó en el Afula de la segunda división de Israel. Con él charlamos.

- Primero contame cómo caíste en tu equipo actual. 
. Al principio me había llamado un entrenador de un equipo de primera, pero no se terminó dando. Y mi entrenador actual, era asistente del que me llamó primero, entonces fue como una recomendación que le dio y me expresó sus ganas de que viniera, me comentó cómo era el equipo, la ciudas, lo que él pretendía... fue bastante sincero. La ciudad es tranqui, tiene cosas para hacer, pero a comparación de Tel Aviv o Haifa, que son las dos más grandes, es chica. Me ayuda a estar enfocado en el básquet. 

-¿Afula está cerca de Nazaret no? 
. Estoy a unos 15 kilómetros. Esto es al Norte. Le dicen la capital del Valle. Es una ciudad que está emergiendo. Tamaño medio. 

- También estás cerca de Cisjordania. 
. Sí, es cerca, pero para lo que es Israel no es tanto. Cuando voy por la ruta a Tel Aviv sí, lo tengo bastante más cerca. Pero está bastante tranquilo todo. Igualmente, te recomiendan evitar que vayas por ahí, aunque normalmente no está pasando nada. 

- Pregunta quizá incómoda. ¿Siendo judío es especial jugar en Israel?
. Te soy sincero. Yo no soy judío. Mi familia paterna sí, toda. Pero es cierto que es encontrarme con parte de mi familia. Mi viejo ahora va a venir y vamos a ir a visitar a varios. Antes eran muchos más pero fueron falleciendo. El primer contacto que hicieron conmigo desde acá fue cuando yo tenía 18 años, así que medio como que siempre estuvo la chance de venir, aunque nunca se dio hasta ahora. Lo estoy viviendo muy contento por ese lado. 

-¿En qué situación está hoy el país en relación al tema siempre complejo de la seguridad en el país?
. Mirá, acá en Afula no pasa nunca nada, ni siquiera cuando estuvieron en conflicto hace dos años, con misiles y demás. Pero estuve bastante en Tel Aviv y en ningún momento te da la sensación de que pueda pasar algo. De hecho yo lo hablo mucho con Juanchi Bergel, que hace unos años está acá y fue uno de los impulsores para que me venga. Y no podemos creer que en ciudades como Tel Aviv o Haifa haya momentos donde se puedan tirar misiles y uno tenga que ir a un refugio. No me entra en la cabeza. Quizá si en algún momento pasa algo, me cambie la sensación, pero hoy lo veo como algo totalmente lejano. Tel Aviv es primer mundo. Como si estuvieras en Barcelona o Amsterdam. Muy occidental y primer mundo. Haifa también. Tiene playa, muchos edificios. Me sorprendió. Y eso que había averiguado bastante antes de venir. 

- Lo diferente es Jesuralén. ¿Estuviste ya?
. No, todavía no porque vienen mi vieja a fin de año con mis hermanas y la estoy esperando para conocerla todos juntos. Que sea un factor sorpresa para los 4. 

-¿Era la primera vez que ibas a Israel?
. Sí, la primera. Incluso en el 2001 estuvimos a punto de venir con mi familia, pero nunca la había visitado. 

-¿Y qué onda el nivel deportivo?
. Muy bueno, no lo esperaba. Al básquet acá se le da mucha importancia, es una liga muy física, donde los jugadores están todos en muy buen estado. Se deja hasta pegar un poco de más, y tácticamente también está bien. Sobre todo a medida que van pasando los juegos. En cuanto a la diferencia con Argentina, la toma de decisiones baja un poco la calidad. Acá hay más tiradores a pie firme. Te liquidan. 

-¿Y es muy distinta la calidad con respecto a la primera división?
. Lo distinto es que en primera hay muchos extranjeros, y de buen nivel, sobre todo los más poderosos. Si midiéramos los de mitad de tabla de primera con los mejores de nuestra Liga, estaría parejo. El nivel de nacionales de argentina es mejor, pero si mirás a los de arriba, se hace muy difícil, porque tienen 6 extranjeros y de primer nivel, más los mejores israelíes. Eso marca la diferencia. En segunda solo pueden jugar dos extranjeros por equipo. 

-¿Vos estás para jugar en primera?
. Creo que sí. Tomé una buena decisión de arrancar en segunda, porque era un cambio grande en todo, pero mi objetivo personal es tratar de ascender y jugar en primera con Afula. Y si no se da, intentar en algún equipo de primera. Influye lo económico, porque algunos equipos de segunda te pueden hasta pagar más que uno de más abajo en primera, por tu rol. 

- Pregunta incómoda dos: ¿si comparás lo que ganabas acá con lo que ganás ahora, hay mucha diferencia?
. Hay bastante diferencia. La realidad es que acá la vida es muy cara. Un microambiente en Tel Aviv sale 1500 dólares por mes de alquiler. Así que imaginate. Entonces un equipo de segunda acá puede pagar más que un club de segundo, por ejemplo, de España. Algunos, no todos. Nuestro presupuesto es de mitad de tabla, pero otros pagan más que un equipo bajo de acb de España incluso. A mí me incluyen alquiler y auto, pero igual es todo muy caro. 

- Están bien en el torneo. Esta semana perdieron el primer partido del torneo sobre 6 jugados. Más allá de querer ascender, ¿estás viendo el panorama europeo o querés quedarte en Israel?
. Sinceramente, estoy mirando más que nada acá. Quiero ascender y jugar en primera acá. Si se da algo en Europa, bienvenido sea. Pero la idea es jugar 3 o 4 temporadas acá por lo menos y después ver. Porque ya tendría 33 y tendría que ver qué quiero yo para mi vida, más que desde lo basquetbolístico. 

-¿Cuando hablás del futuro de tu vida manejás la posibilidad de quedarte a vivir allá definitivo?
. Veo difícil quedarme el resto de mi vida acá. Yo quiero demasiado a Argentina como para imaginarme una vida totalmente afuera. Pero no quiero adelantarme tanto en el tiempo porque por ahí en 4 años estoy en una situación muy distinta y me quedo. Mi objetivo corto es 3 o 4 años acá, viendo cómo me siento. Se extraña, pero no lo estoy padeciendo. 

-¿Extrañas la Liga o la vida argentina?
. La Liga obviamente se la extraña, el hecho de recorrer todo el país con un equipo, pero lo más extraño es juntarme con mis amigos, mi familia. El día a día de Argentina, aunque acá son muy sociables, es insuperable. 

Fabián García / [email protected]
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