Especial

Por qué Pablo Prigioni debe seguir al frente de la selección

10:44 08/03/2023 | Pablo está cerca de arreglar su continuidad con la Confederación tras la dolorosa eliminación de Argentina del Mundial.

Prigioni es el entrenador argentino que más lejos llegó hasta ahora (Foto FIBA)

Uno de los tantos rebotes que ha generado la eliminación de Argentina del próximo Mundial de básquetbol es el tema de su entrenador. Desde 1997 a 2021 (24 años), Argentina había sido modelo a nivel planeta en cuanto al trabajo continuado de sus entrenadores de selección: Julio Lamas (1997-1999), Rubén Magnano (2000-2004), Sergio Hernánde (2005-2010), otra vez Lamas (2011-2014) y otra vez Hernández (2015-2021). 

La salida de Oveja provocó un cambio fuera de ese tridente que, más allá de su fracaso posterior, fue apoyado por una buena parte del ambiente del básquetbol, sobre todo del rubo entrenadores: Néstor García. El Che no solo mantenía una muy buena relación con los tres antes nombrados extécnicos del equipo nacional, sino que gozaba de un respeto generalizado de los Generación Dorada, además de tener un nombre en América. 

La apuesta salió mal, muy mal, básicamente por responsabilidad del bahiense, que fue despedido en agosto del 2022 luego de algunos incidentes relacionados a su conducta y disciplina. Eso ocurrió menos de una semana antes del comienzo de la Americup, por lo que hubo que ir por una solución rápida. Sorpresivamente, Pablo Prigioni aceptó hacerse cargo y su debut no pudo ser mejor: campeón invicto en Brasil. 

Luego vinieron dos Ventanas, donde hubo lagunas grandes, destacándose el fatídico partido contra Dominicana. Muchos le cayeron a él y Pablo asumió toda la responsabilidad del resultado en la conferencia de prensa posterior. 

Más allá de los errores cometidos en ese partido, que los hubo, por inexperiencia o poca habitualidad al cargo de entrenador principal, estamos convencidos de que Pablo es el hombre indicado para hacerse cargo de esta próxima y dura etapa que se le viene a la Selección Argentina. 

Por un lado, creemos que se merece una revancha por lo ocurrido, y el Prerepechaje en agosto es una primera oportunidad. Para él y para todos. Y, si se consigue el pase, el Repechaje Mundial para llegar a París 2024 puede ser un paliativo para alcanzar el gran logro más cercano que existe, que sería un lugar en los Juegos Olímpicos. 

Obviamente, el primer convencido debe ser él. Porque el trabajo de asistente es muy desgastante en la NBA. Son de los que más trabajan en lo basquetbolístico, y tienen muy pocas vacaciones, entre campus, ligas de verano y pretemporada. Ocupar el espacio libre, en parte, con la selección, es una decisión familiar, y Pablo seguramente la tomará con su esposa Raquel y sus hijos. 

De este lado, sin esa obligación, esperamos que siga. Primero, porque es el único argentino de su rubro que está en el máximo nivel mundial de este juego, la NBA, y hace ya 4 años. ¿No es entrenador principal? No, no lo es. Pero convive todo el tiempo con lo más avanzado. ¿No tiene la gimnasia de un coach principal activo? No, no la tiene, pero eso no implica que en una situación de mejor preparación, más larga, su incidencia sea más alta.

Hasta ahora, Pablo tuvo unos pocos entrenamientos antes de la Americup, otros pocos antes de la Ventana de noviembre, y más o menos los mismos ahora antes de jugarse todo ante Canadá y Dominicana. Difícil imponer una forma o ajustar detalles finos de funcionamiento. Para agosto, si se queda, tendrá más tiempo, y podría empezar a ponerle un poco de su marca al equipo. Lo mismo si además jugara un Repechaje el año que viene. 

Lo que sí creemos es que, si Prigioni sigue, la CAB deberá reorganizar mejor su staff técnico y sistema de entrenamientos de los jugadores que actúan en la Liga Nacional. Es indispensable contar con al menos un entrenador de jerarquía que se dedique a la selección todo el año, controlando trabajos individuales e, idealmente, haciendo miniconcentraciones periódicas para afianzar conceptos. 

Si después de 24 años con 3 entrenadores, Argentina ficha a 3 en un año, sería una mala señal. No todo depende de la CAB, pero si está en sus manos, no debería dudarlo. 

 

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