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Carlos Delfino vivió esta semana unos días maravillosos, en los que volvió a ponerse la camiseta argentina, volvió a jugar para su gente, que lo ovacionó en los dos partidos en Obras, jugó un partido muy bien (el otro no tanto), y conoció a chicos que nunca había visto en su vida, a los que tuvo de compañeros. 

Uno fue Juan Fernández, que además de ser el más joven de la selección (20 años), es santafesino como Carlos y se formó en Unión, el club de los amores de Carlitos. Eso hizo que tuvieran un feeling especial, pese a que a Carlos le hacía un poco de ruido tener a un compañero menor que su hija. 

La cuestión es que el joven que juega en el Fuenlabrada, pese a no ser muy verborrágico, cumplió la teoría que dice que los jóvenes actuales son más desestructurados y no les importa demasiado la diferencia de edad para comentar lo que piensan. 

Fernández entonces se le acercó a Delfino en uno de los entrenamientos y, tal como contó el propio Carlos, se animó a darle un consejo: "Me dijo que los pantalones largos no van más, que tengo que usar ropa más ajustada. Me estoy quejando con Facu Vartanian porque no me gusta la ropa ajustada (risas)". 

Más allá de la broma, a Delfino le encantó que los chicos se le acerquen: "Son mucho más jóvenes que yo y está bueno para mí estar al lado de ellos porque estoy motivado para competir y estar a su altura. A la vez trato de estar cerca para que puedan venir y pedirme un consejo o simplemente tenerme en cuenta para algo, porque puedo darles una mano también adentro de la cancha".