Cargado de poder anotador, Ferro promete meterse en la lucha grande
17:15 09/09/2017 | Los de Rearte serán uno de los planteles con más recursos ofensivos del torneo. ¿Podrán acoplar a sus piezas de la mejor forma en ambos costados?
Posible rotación
Ferro (CABA)
|
|||
Base
|
Franco Balbi
|
Diego Figueredo
|
|
Escolta
|
Walter Baxley (E)
|
Iván Gramajo (U23) | |
Alero
|
Aaron Harper (E)
|
Martín Cuello | |
Ala pivote
|
Jaz Cowan (E)
|
Ariel Ramos (U23)
|
|
Pivote
|
Ignacio Alessio
|
Kevin Hernández
|
|
DT: Ariel Rearte
|
Las caras nuevas
Diego Figueredo: Será uno de los varios jugadores que este año den el salto TNA/Liga Nacional y aparece como uno de los más capacitados para hacerlo. A sus 25 años, en la 2016/17 promedió 12,5 puntos y 3,8 asistencias para el subcampeón Estudiantes de Olavarría, incluyendo un 41% en triples. Tiene material para darle buenos minutos de descanso a Balbi en la base.
Walter Baxley: Ferro apostó por una garantía ofensiva en la posición de escolta, quien viene de promediar 17,7 puntos para Atenas en la Liga anterior, más allá que desde lo colectivo nunca terminó de acoplarse al equipo cordobés. En un quinteto con mucho poder de gol, tendra la ventaja de recibir menos atención de las defensas y poder desarrollar su juego de la mejor manera.
Aaron Harper: El alero de 36 años posee una infinidad de recursos anotadores, incluyendo una excelente mano de tres puntos (42% en la 2016/17). Sus 16,6 puntos pasaron algo desapercibidos por el flojo rendimiento de Quimsa, pero al llegar a un conjunto armado para pelear arriba, promete convertirse en figura. Eso sí, veremos cómo se complementa con Baxley, tanto en ataque como en defensa.
Ariel Ramos: Ramos dejó Bahía Basket buscando un protagonismo mayor y en principio, podría tenerlo en Ferro gracias a sus características: de los cinco internos (sumando al brasilero Rómulo Gusmao) es el único que tiene un tiro de tres sólido.
Jaz Cowan: El estadounidense no tuvo su mejor temporada en Quimsa (9 puntos), pero es un interno experimentado y que siempre rindió dentro de nuestra Liga. Ahora le tocará lo más difícil: demostrar que puede ser el cinco titular de un equipo con pretenciones muy altas. El jugar con Balbi al lado, seguramente lo beneficiará y le dará puntos fáciles.
El equipo
Luego de una temporada 2016/17 que recorrió con una muy buena fase regular, pero con una importante frustración en los playoffs ante Quilmes, Ferro tomó la decisión de cambiar parte de su proyecto. Ariel Rearte reemplaza a Alvaro Castiñeira en el banco de suplentes, mientras que apostaron por tres nuevos foráneos, todos con jerarquía y experiencia en la Liga. Si a esto le sumamos el hecho de que lograron mantener a sus nacionales más importantes (salvo Maldonado), estamos hablando de un conjunto extremadamente fuerte desde los nombres
¿Para qué puede estar Ferro? Hay varios factores que lo determinarán. Ya tocaremos temas ofensivos y defensivos, pero la primera referencia pasa por la profundidad de la rotación. Cuello y Hernández son dos jugadores capaces de desequilibrar desde la segunda unidad, pero también precisarán de la evolución de sus jóvenes (Gramajo y Ramos) y una buena adaptación de Figueredo a la primera categoría. Si quieren competir de igual a igual contra los clubes más potentes del torneo, precisan un equipo largo y con soluciones entre los relevos.
Ofensivamente está claro que el Verdolaga es uno de los planteles con más recursos y variedad de toda la competencia. Guiado por Balbi, Ferro no solamente está repleto de buenos tiradores (Baxley, Figueredo, Gramajo, Cuello, Harper, Ramos, el propio Balbi), sino que además posee a varios jugadores acostumbrados a ser primeras o segundas opciones anotadoras en sus respectivos equipos. Cualquiera puede anotar por encima de los 10 o 15 puntos en una noche, lo que complicará la vida del scouting rival y evitará el peligro de la sequía generada por la dependencia de una o dos figuras. ¿La incógnita? Cómo acoplarán tantos nombres que necesitan el balón para ser efectivos, dentro de un grupo sin demasiados jugadores de rol.
De todas maneras, el mayor desafío para Ferro estará en el costado defensivo. Su juego interior no es malo, pero el perímetro podría terminar siendo algo permeable en el campo propio. Los de Rearte no deberían tener demasiados problemas para anotar y jugar por encima de los 80 puntos, pero para consolidarse realmente en la lucha tendrán que hacer un muy buen trabajo en la marcación grupal, tratando de compensar ciertas debilidades desde lo individual.
Notas Relacionadas
Quimsa se llevó su primer amistoso en Capital: 84-78 a Ferro
Ferro comenzó a cerrar su plantel: fichó a Aaron Harper
Ariel Ramos llegó a un acuerdo para ser una de las fichas U23 de Ferro
Ronaldo Córdoba es el nuevo coordinador de formativas de Ferro
Tras perder a Clemente, Ferro optó por el fichaje de Jaz Cowan
Ferro pisó fuerte en el mercado: contrató a Walter Baxley