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Philadelphia 76ers suma un golpe más a su accidentado inicio de temporada: la lesión de Tyrese Maxey, su gran figura en ausencia de Joel Embiid y Paul George. Maxey, quien venía de un arranque explosivo con un promedio de 27.6 puntos y 3.9 asistencias por partido, estará fuera al menos dos semanas debido a una lesión en el tendón de la corva, según reportó Shams Charania de ESPN. Esta baja se suma a la larga lista de problemas físicos que han perseguido al equipo en las últimas temporadas, complicando aún más un comienzo que los ha dejado en el fondo de la Conferencia Este con una marca de 1-6.

Las constantes ausencias han dejado a Philadelphia sin poder consolidar un núcleo fuerte en cancha. Paul George, quien apenas volvió de su propia recuperación, ha disputado únicamente dos partidos, y se espera que Embiid, todavía sin debutar, regrese la próxima semana. Estas bajas han minado la capacidad de los Sixers para competir y, tras la pérdida de Maxey, el equipo deberá buscar alternativas para mantenerse competitivo en un calendario que no da tregua. La dependencia en la versatilidad y el talento de Maxey se evidenció con su desempeño en los primeros encuentros, donde sus puntos y liderazgo ofensivo parecían ser el único sostén de Philadelphia.

Las estadísticas son una prueba irrefutable de lo crucial que es contar con un equipo saludable. En la temporada pasada, Maxey y Embiid coincidieron en solo 36 partidos, logrando un récord notable de 29-7 en ellos, una marca que destaca el impacto de ambos en la cancha cuando están en plenitud física. La falta de continuidad y la presión de mejorar el rendimiento para evitar una situación crítica ahora pondrán a prueba al plantel y al cuerpo técnico de los 76ers, quienes deberán encontrar soluciones si pretenden revertir una dinámica que parece repetirse temporada tras temporada.