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Las sensaciones que vienen ocurriendo con Denver con muy cambiantes. Un día los amamos, nos parecen fenómenos y al día siguiente, se los critica como si fueran unos perros y no hubiesen hecho nada en esta temporada. Quizá, lo que molesta más, es a veces cierta desidia defensiva que lleva a pensar que en algunos jugadores el compromiso no es total. 

Pero si ponemos en el análisis la baja de Jamal Murray (estrella top 25 de la Liga, sin dudas), más las de Barton (hasta hace pocos días) y Dozier, haber eliminado a un equipo como Portland ya es muy meritorio. Claro que, contra Phoenix, queda en evidencia la diferencia de jerarquía colectiva del rival, y de sus líderes. 

Anoche, Phoenix volvió a ser una pesadilla en momentos clave del juego, liderados por Chris Paul y Devin Booker, y al colega Sean Keller, del Denver Post, no se le ocurrió mejor idea que tirar una metáfora muy dura para con Facu Campazzo y Austin Rivers. 

Dice textualmente el informe de Keller: "La media cancha inicial de los Suns es un Lamborghini. La media cancha titular de los Nuggets es un Yugo. Facu Campazzo y Austin Rivers, Dios los bendiga, solo tienen un límite de potencia para dar. El cuento de hadas ha estado funcionando durante una semana".

Lo de Keller siguió siendo muy duro al analizar lo de algunos jugadores. "¿Jokic? Un guerrero. ¿Morris, que respondió a un mensaje de texto de Malone con una actuación de 21 puntos? Un guerrero. ¿Barton, que lucha contra su reciente lesión y sumó 14 puntos y 7 rebotes? Un guerrero. ¿Aaron Gordon? Asustado. Suave". 

Keller cuenta además que el presidente del equipo, Josh Kroenke, fue abucheado por la gente antes incluso del partido. El título de la nota y el primer párrafo, dan cuenta además de su idea general de la situación: "Finalmente el equipo chocó contra la pared Murray. A 200 kilómetros por hora".