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Decisiones de vida. Y, por lo tanto, incuestionables. Cuando una persona toma una decisión teniendo en cuenta que no está viviendo como quería, o que siente que necesita otra cosa, nadie puede opinar. Y menos que menos, criticarla. Cada quien hace lo que quiere con su vida, porque es suya. No le debe dar explicaciones a nadie. 

Hace dos meses y medio, casi terminando enero, Juan Manuel Fernández tomó la decisión sorpresiva de dejar al Trieste, equipo italiano de la Lega, en el que llevaba cinco temporadas. Su trabajo había sido bueno y ya era uno de los jugadores símbolo de la franquicia. Querido, respetado y en una ciudad y zona hermosa, pegada a Eslovenia. 

Tanto cuando se volvió a la Argentina en ese momento como hace pocos días, quisimos hablar con él, pero amablemente nos contestó que no quería por ahora dar entrevistas, algo que respetamos absolutamente, por lo mismo que dijimos al principio. No estaba claro si su determinación era temporal, si había pasado algo concreto (por distintas fuentes supimos que no), y si volvería a jugar profesionalmente, pero esta semana quedó el tema despejado.

Juan subió esto a su perfil de Linkedin: "Soy un exatleta profesional con una carrera de 10 años en el baloncesto europeo, con experiencia jugando en las ligas Serie A italiana, LEB Oro española y Liga Nacional Argentina y también fui miembro de la selección nacional masculina de Argentina en varios torneos internacionales. En 2022, decidí alejarme de mi carrera como jugador para perseguir nuevas ambiciones de vida y carrera. Hoy soy parte del equipo TEMPOSS, una oportunidad que me permite conectar dos mundos que he llegado a amar a lo largo de mi carrera: los deportes universitarios y los viajes".

¿Qué es Tempo? Lo dicen ellos mismos en su sitio web: "Nuestra misión es asegurar que los atletas, equipos, entrenadores y sus seguidores reciban el mejor servicio posible que refleje nuestra profesionalidad y amor por nuestro trabajo. Nos identificamos con la importancia tanto del deporte como de los viajes y buscamos promover la sinergia con el deporte y las experiencias culturales". Una mezcla de asesoramiento para competir y viajar. Recordemos que Juan estudio 4 años en la Universidad de Temple en los Estados Unidos, la misma de Pepe Sánchez, y siempre tuvo una mentalidad un tanto distinta del común de los deportistas. 

En el mismo perfil de Linkedin, Juan se presenta como co-director de operaciones internacionales y se dice instalado en Venice, Florida, Estados Unidos. Desde acá, el apoyo para un pibe que tuvo mucha presión desde joven por ser algo que quizá no ansiaba. Y que ahora tomó un camino que pocos se animan, al dejar el confort de un buen salario en el deporte profesional para empezar de cero en otra cosa. Chapeau.