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Son varios los entrenadores argentinos que enaltecen la gran escuela de formación albiceleste y en este caso uno de los que dirá presente en el Mundial 2023 de Japón, Indonesia y Malasia será Fernando Duró. Afrontará su segundo certamen ecuménico como director técnico principal de Venezuela.

Venezuela estará en la Zona F y allí enfrentará a Eslovenia, Georgia y Cabo Verde. El seleccionado sudamericano está en Caracas llevando adelante su preparación y dialogamos con Duró para conocer cómo está el equipo, las expectativas de cara al Mundial y más.

-¿Con qué expectativas encaran el Mundial?
.Desde ya que el camino que venimos recorriendo en esta segunda etapa culminó otra vez con la clasificación al Mundial. Esto sumado al proyecto nacional ya vigente, hace que los objetivos se vayan cumpliendo ampliamente, comenzando también el recambio generacional y la inserción de jovenes dentro del seleccionado mayor.La preparación la comenzamos en Caracas hace una semana y el objetivo más importante es llegar lo más competitivo posible, pensé que nosotros jugamos cada cuatro años con los europeos, con los africanos, con los asiáticos. Queremos llegar muy bien al partido con Eslovenia, nuestro primer partido en el Mundial. Las expectativas son las mismas que en China, pasar a segunda fase, lo cual implicaría ganarle por primera vez en la historia a un equipo europeo, así que tenemos un lindo desafío por delante.

-¿Qué análisis haces de los rivales que les tocó?
.Todos los rivales tienen sus realidades. Primero miramos cuál fue su competencia continental. En el caso de Cabo Verde sabemos que su pilar fundamental es Edy Tavares, a partir de él construyen todo su ritmo defensivo y ofensivo; a Eslovenia lo enfrentamos en el Repechaje Olímpico y nos vino muy bien para sacarnos ese miedo que había de enfrentar a una gran potencia; Georgia es un debutante mundialista con jugadores, en el caso de Giorgi Shermadini fue elegido el mejor interno de la Eurocup, Tornike Shengelia es un jugador con mucha experiencia y tiene muchos jugadores en ligas europeas que lo hace una potencia de segundo nivel. Es el gran desafío a vencer.

-¿Analizas más allá de la primera ronda, es decir los posibles rivales de la segunda ronda?
.Si, si. Los cuatro equipos también juegan en Okinawa: Japón, Alemania, Australia y Finlandia los estamos viendo porque nos interesa competir. Para Venezuela cualquier partido es importante. No importa si es para arriba o para abajo, cualquier partido, cualquier roce, nos sirve, nos ayuda. Fíjate que en el Mundial 2019 en China hasta el último día, que jugamos con Rusia, competimos al 100%. No importa cuál sea el resultado, vamos a competir, no nos frustramos si no llegamos a semifinal. El objetivo está cumplido, ahora tenemos que ganar experiencia internacional. No solamente lo estamos haciendo con este equipo, sino que tenemos otro que va a ir a competir a un torneo en China, entonces queremos aprovechar este momento histórico de Venezuela para consolidar el futuro del básquet.

-Vienen de varios años de logros importantes, la clasificación a Río, los dos Mundiales. ¿Por qué crees que se dio esto?
.Hay una generación de jugadores que quizás se da dos o tres veces en la vida. La tuvieron en Portland en 1991 que llegaron a Barcelona y la tienen ahora con este equipo que hay jugadores que todavía continúan vigentes. Son generaciones. Hay países que no lo logran nunca, hay países que pueden generarse de un ciclo al otro. Vamos a tratar que este ciclo pueda extenderse un poco más. Venezuela, gracias a Dios, lo consiguió dos veces con una generación que todavía tiene seis o siete jugadores vigentes.

-¿Cómo se vive esto en Venezuela, cuáles son las expectativas a nivel país?
.Siempre estar en un Mundial, en cualquier deporte de conjunto, en Venezuela es muy importante. El beisbol es el deporte nacional, viene de jugar la Serie del Caribe, la Serie Mundial, hay mucha expectativa por los deportes de conjunto. El básquet tomó esa segunda colocación detrás del beisbol, incluso casi dejando atrás al fútbol y toda la eliminatoria para el Mundial. El básquet viene de una década maravillosa, brillante.

-¿Crees que puede tener injerencia el trabajo de dos entrenadores con mucho bagaje internacional como vos y el Che García en esta generación importante de Venezuela para lograr cosas importantes?
.Nosotros tratamos de mostrar una escuela que es la argentina, de formación, con el estilo venezolano y hacer una combinación. Néstor lo entendió muy bien y yo lo entendí muy bien. En mi caso, la filosofía de juego que tengo yo tiene mucho que ver con el ADN de los venezolanos, de contraataque, de transición. Después le pusimos la defensa, el pase extra, la disciplina que creemos nosotros, en mi caso los valores con los que llevo el proyecto. En siete años conseguí grandísimos objetivos con este equipo, aparte de los deportivos, los que tienen que ver con los valores, con el compromiso, con la pertenencia, el trabajo en el equipo. Todos los jugadores que están en la Selección jugaron en otros países para tener competencia permanente, eso es lo que estamos tratando de lograr con la Federación, de tener dos competencias para que nuestros criollos tengan continuidad laboral y deportiva.

-Es imposible no preguntarte por Argentina y la eliminación del Mundial. ¿Cómo analizas lo que le pasó?
.Las Ventanas no lo favorecen a Argentina porque muchos de sus jugadores no pueden jugar en ellas, entonces a veces hace que lo que tenés localmente y los pocos que pueden venir, no pueden competir a ese nivel. En el caso por ejemplo de Venezuela, está siempre completo. Además se dio que Dominicana creció, Venezuela sigue estando latente mundialmente hablando, le tocó una zona muy pareja. Lo importante que tiene Argentina es el proyecto, tiene los clubes, tiene la competencia, tiene los jugadores jugando en los mejores niveles internacionales, entonces rápidamente va a volver porque tiene proyecto. El problema son los países que no tienen proyecto que por una derrota ya quieren cambiar todo. La fortaleza que tiene Argentina es su producto interno en competencia, en clubes, por eso es que hace 30 años venimos dignificando el trabajo de los clubes, de los entrenadores en los clubes, de las formativas, de nuestra escuela de básquet. Creo que fue algo circunstancial, sorpresivo sin dudas, pero que lo van a recomponer rápidamente.

-¿Crees que la eliminación de Argentina puede tener impacto en Sudamérica?
.No se, como te digo, Argentina sigue siendo una potencia mundial. Debe ser uno de los países de América que sostuvo la preponderancia en el ranking mundial. El impacto es un llamado de atención: ‘Le pasó a Argentina, cómo no nos va a pasar a nosotros’. Es como Canadá. Hace 20 años que tiene flor de equipo, potencialidades en todos estamentos en las mejores ligas del mundo y no pueden trascender a nivel mundial. Pero continúan, insisten. Creo que está en la habilidad de los presidentes federativos de crear un contexto que te permita, por ejemplo, no clasificar a un Mundial y reciclarte rápidamente.

Federico Radulovich / [email protected]
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