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Gastón Whelan es el conductor y el cerebro de Bahía Basket, que luego de perder tres partidos de forma consecutiva, se recuperó este sábado goleando a Peñarol. A continuación, hablamos con el base para conocer más del presente de uno de los conjuntos más fuertes del Sur.

- Fue una primera mitad muy pareja, pero lo quebraron en el segundo tiempo. ¿Con qué análisis te quedás del partido?

. Bueno, primero que nada era importante volver al triunfo, luego de una gira que había sido bastante negativa. Era importante retomar la línea de nuestra identidad. Se dio un primer tiempo parejo, donde nuestra producción ofensiva no fue la que nosotros buscábamos. Ellos tomaron tiros cómodos y por suerte nos fuimos al descanso con una desventaja no tan amplia. A partir del tercer cuarto, empezamos a ser más agresivos a la hora de defender, los incomodamos como nosotros buscamos y tomaron tiros incómodos. A través de los rebotes defensivos y los recuperos de pelota, logramos correr la cancha que es el juego que mejor nos sienta.

- ¿Era clave la paciencia ayer? Teniendo en cuenta que a ellos les faltaban tres fichas, era lógico imaginar que podían desgastarse en la segunda mitad.

. Sí, creo que era clave la paciencia y también la intensidad. Tratar de cansarlos, que no jueguen cómodos y a lo largo de los 40 minutos, sabíamos que íbamos a tener más resto físico para llegar a un final cerrado con más piernas. Por suerte a partir del tercer cuarto le hicimos sentir ese desgaste y esa intensidad defensiva. Como te decía, corriendo la cancha marcamos diferencia en el marcador y eso nos permitió jugar más tranquilos en el final.

- Me parece que les vino muy bien la vuelta de Fjellerup. ¿Lo extrañaron bastante en la gira?

. Sí, sin dudas. Nosotros necesitamos de todos los jugadores, para que nuestro equipo se haga bastante largo y poder mantener una intensidad, para desgastar al rival. Maxi nos brinda no solamente puntos, sino también rebotes defensivos, rebotes ofensivos, defensa, le da minutos de descanso a Lucio, a Juan Pablo... es un jugador que nos brinda mucho más que solo puntos. Creo que por ahí lo extrañamos, pero es clave él, como el resto de los compañeros que vienen desde el banco.

- ¿Tenés un análisis de qué pasó en la gira?, ¿en qué fallaron?

. En la gira nuestro primer déficit fue la producción ofensiva. Lo mejor en los tres partidos fueron 67 puntos contra Boca. Estuvimos muy flojos en el ataque. Tomamos malos tiros y nuestra efectividad bajó muchísimo. No circulamos la pelota, ni generamos ventajas para que nuestros compañeros tomen tiros bien seleccionados. Si bien defendimos intensos y bajamos el goleo del rival, faltó convertir más. Esa fue la clave de los tres partidos. Hay que seguir trabajando, porque hay muchas cosas que pulir todavía.

- ¿Sentís que hoy tienen que pulir algunas cosas para retomar el nivel del cierre de la temporada pasada o pensás que están en una producción similar?

. Creo que tenemos muchas cosas para pulir, con respecto a la temporada pasada. Tenemos que seguir trabajando para conseguir ese nivel superlativo que supimos tener a fines de la temporada anterior. Tenemos que ser más constantes. Trabajar mejor el juego estacionado en el 5 contra 5, tratando de no ser tan predecibles. Hay que mejorar la circulación de la pelota, para que los rivales tengan mayores dificultades a la hora de defendernos.