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La Liga 2016/17

Osella: "Si alguien me podía alcanzar, no dudaba que ese alguien iba a ser Leo"

03:11 29/03/2017 | La Torre de Oncativo habló con Básquet Plus el día que Leo Gutiérrez lo superó como jugador con más partidos en la Liga. "Lo de Leo va a ser inalcanzable", elogió.

Osella y Gutiérrez, dos símbolos que marcaron su huella en el básquet argentino
Leo Gutiérrez alcanzó los 1.097 partidos en la Liga Nacional para convertirse en el jugador con más presencias dentro de la máxima categoría. El ala pivote destronó al anterior dueño de esta prodigiosa marca, Diego Osella, la recordada Torre de Oncativo que llegó a sumar 1.096 juegos entre 1988 y 2011.
 
Y si bien el protagonista de estas horas no es otro que Gutiérrez, también es interesante recordar un poco la huella de supo dejar Osella. Campeón de Liga en seis oportunidades y partícipe de la época gloriosa del Griego, aquel lungo de 2.07 del cual siempre se dijo que no le gustaba el básquet, se prestó a una breve charla con Básquet Plus para hablar del récord que acaba de romper Leo y recordar aquellos años donde se calzaba los cortos para salir a la cancha.
 
Osella y Gutiérrez compartieron equipo durante varios años en Atenas (de 1998 a 2001 y de 2008 a 2009), saben lo que es ganar títulos y dejar un legado dentro de la Liga. Por eso, como ese ícono que siempre será independientemente de quien encabece las tablas de los récords, Osella analizó un poco la trascendencia de la figura que marcan jugadores con tantos años dentro de la competencia y habló de algunas similitudes que tienen estos jugadores que han marcado una verdadera era en la máxima categoría.
 
- Imagino que los partidos iban pasando y, sobre todo en este último tiempo, eras consciente de que Leo cada vez se te acercaba más y te iba a pasar en algún momento.
. Primero te digo que la verdad nunca me imaginé que yo pudiese llegar a tener el récord de más partidos. En su momento cuando jugábamos con Marcelo no me imaginé siquiera que lo podía alcanzar a él, me llevaba más de cien partidos por ahí. Era mucho, no pensabas que podías llegar. Después sí, sabía que en algún momento alguien me iba a alcanzar y superarme a mí, y sabía que ese alguien iba a ser Leo, por lo que ha representado y por lo que viene jugando. Cuando Leo se retire creo que van a pasar más de seis años, muchos más, para que alguien pueda alcanzarlo. De eso no tengo dudas.
 
- ¿Te pusiste a pensar lo que generan figuras tanto Leo como vos en la historia de la Liga? Porque ambos, junto con otros grandes que hubo en nuestra competencia, son de esos referentes que quedarán por siempre.
. Sí. Más allá de los números y de que ahora le toque la posta a otro en cuanto a la cantidad de partidos, creo que uno se pone a ver la carrera que ha hecho y se siente gratificado. En mi caso jugué más de 20 años a algo que siempre me gustó, creo que eso es lo que más te marca, poder hacer algo profesional con el mismo gusto que un amateur. Saber que tuve la posibilidad de jugar tantos años, y poder conseguir cosas importantes, desde la gente que me dejó la carrera como así también los títulos. Creo que ahí es donde uno se da cuenta que quizá marcó una época, porque la gente que te cruza por la calle te puede reconocer, decirte que se acuerda de vos porque jugabas al básquet o porque de algún lado te conoce. Creo que esas cosas son las más lindas que te pueden pasar.
 
- ¿A vos te pasó de darte cuenta la magnitud de tu figura post retiro o ya lo veías antes?
. No, te vas dando cuenta pero en ese momento no lo ves tanto, lo ves más cuando te alejás de la actividad. Yo por ejemplo tengo un complejo de cabañas acá en las sierras y viene mucha gente de muchos lugares, un turismo de cualquier parte que te imagines. Y pasa a veces que muchos te reconocen, primero relacionan que medís más de 2 metros y ahí se van dando cuenta. Acá en Córdoba la gente siempre te conoce, pero en otras ciudades donde vas también pasa. Es algo que te lo da el básquet mismo, que en cierta época ha marcado a mucha gente ya sea por Atenas o en otra ciudad, sabiendo que en nuestro tiempo el básquet era tan fuerte en todos lados. Aunque ojo, muchas veces me confunden con Oberto jajaja.
 
- Pensaba un poco la particularidad que tienen jugadores como vos y Leo, y se me vienen a la cabeza algunas cositas como que ambos son cordobeses, líderes, con pasado ligado en Atenas, con tantos títulos... ¿Pensás un poco estas similitudes?
. No es muy difícil encontrar motivos. Los jugadores que han marcado mucho en la Liga, primero con Marcelo (Milanesio), luego conmigo y después con Leo, han tenido la particularidad de haber jugado temporadas largas y sobre todo sanas. Son muchas temporadas de cada uno encima, y yo que he jugado con los dos, primero con Marcelo y después con Leo, te lo puedo decir bien. Leo y yo jugamos más de veinte años en Liga y Marcelo debe andar por ahí también. Tengo una buena relación con los dos y puedo decirte lo mismo que te dirían ellos, que el secreto es que afortunadamente hemos tenido trayectorias con muchos partidos sin sufrir lesiones que te compliquen. Eso también es un motivo, porque hubo varios talentosísimos jugadores que sufrieron muchas lesiones en su carrera y eso les impedía seguir jugando. Por eso es que Marcelo jugó mucho, yo jugué un poco más y, como te decía antes, me parece que Leo va a seguir estirando el récord. No solo el récord este de partidos sino en todo lo demás, los triples, los diez campeonatos que tiene... todo, me parece que en todo va a ser inalcanzable. Ahora va a ser el que va a estar arriba y todos lo van a querer alcanzar, pero me parece que va a ser muy difícil lograr todo lo que logró él.
 
- A veces uno hace un recuento de grandes jugadores que ha dado la Liga y hay un par que se vienen a la cabeza de memoria. Justamente Milanesio, Leo y vos son tipos que por ejemplo no faltarían en una asociación general.
. Puede que pase porque al principio todos los jugadores jugábamos acá en la Liga Nacional, casi ninguno se iba a jugar afuera. Marcelo nunca salió de acá, yo solamente estuve dos años y creo que Leo también estuvo un año o dos afuera. Quizá esa es la coincidencia por la asociación, por estar tanto tiempo jugando en la misma liga. Después no sé si hay algo más. En la época en la que yo batí a Marcelo creo que ninguno me ponía de candidato a que jugara para llegar a ese número, ningún periodista se jugaba por mí seguro jaja. Siempre fui tildado como el tipo que renegaba por jugar. Y la verdad es que se me fue dando, se dio todo para que siga jugando y como es lo que siempre me gustó lo disfruté a cada instante. Creo que cuando uno hace esto por tantos años, después cuando llega el momento de dejar es lo más difícil.
 
- ¿A vos cuando te pasó qué fue lo que más extrañaste?
. Lo primero que extraño es el físico jaja. Pero no soy de extrañar mucho porque pude encontrar rápido cómo seguir, con mis cosas, mi familia y mi hija que recién nacía. Igual siempre se me vienen muchas cosas a la cabeza, recuerdos, cataratas de momentos que me dan algo de nostalgia pero que disfruto. Se vienen a la cabeza desde los primeros años que llegué a Atenas hasta lo último, todo lo bueno, lo malo, los campeonatos que he conseguido y ganado. Me pasaron muchas cosas fuertes, porque de un año estar jugando en Oncativo en Liga B a estar jugando al otro año en la selección, estar jugando al poco tiempo un Mundial representando a Argentina, son cosas que en ese momento uno no suele detenerse a verlas tanto pero que hasta el día de hoy tiene imágenes frescas de todo lo que pasó. Por suerte mi carrera, si la tengo que poner en una balanza, terminó siendo muy gratificante. Como te decía, estar en la selección, jugar en equipos importantes, ganar torneos y todas esas cosas tan lindas, es algo que si hoy volviese a los 18 años no me hubiese imaginado que iban a pasar. Realmente disfruto de todo lo que me ha pasado y de lo que me sigue pasando hoy cuando voy a Córdoba donde la gente me reconoce y me demuestra su afecto. Más allá de que hoy algún chico no te pueda reconer porque si no jugaste en la NBA te mira medio raro o no sabe quién sos, la verdad es que la Liga también ha marcado una época muy pero muy linda en el deporte argentino, y eso a nosotros nos satisface mucho porque hemos podido vivirla. 
 
 

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