Lo merecía Bahía, pero Mogi ganó y acaricia el título: 80-77
21:46 24/11/2016 | Bahía Basket hizo un verdadero partidazo pero se quedó sin premio en el final. Mogi ganó de nuevo, puso la serie 2-0 y quedó match point.
Levy y Jasen, dos factores determinantes en un Bahía que estuvo a punto de dar el golpe (foto: FIBA)
MOGI DAS CRUZES (2) vs. BAHIA BASKET (0)
. Juego 1: Mogi 77 - Bahía 72 (1-0)
. Juego 2: Mogi 80 - Bahía 77 (2-0)
. Juego 1: Mogi 77 - Bahía 72 (1-0)
. Juego 2: Mogi 80 - Bahía 77 (2-0)
Mogi das Cruzes (2) 80 - Bahía Basket (0) 77
Mogi das Cruzes y Bahía Basket protagonizaron un duelo formidable este jueves, en el marco de la segunda final de la Liga Sudamericana y en un partidazo de enorme suspenso que nunca bajó de un pico de tensión altísimo. Terminó siendo para el cuadro anfitrión por 80-77, que sumó su segunda victoria en esta serie para ponerse 2 a 0 y que ahora tiene al menos un triple match point a su favor para llevarse el título.
Bahía hizo un desgaste admirable. Mereció más, pero algunos fallos no lo favorecieron y sintió poco a poco la presión de un rival que se agrandó. Los bahienses ahora volverán al Casanova para evitar la barrida, además de que deberán buscar una remontada heroica en una serie que se le puso demasiado cuesta arriba. Jamaal Levy fue el mejor del equipo argentino con 20 puntos.
La actitud de Bahía arrasó con Mogi en el arranque del juego. En 24 horas el carácter de ambos cambió rotundamente, sobre todo por lo que provocó Bahía al anular las posibles conexiones brasileñas. El trabajo sobre Shamell fue descomunal, y adelante encontró respuestas rapidísimas en Levy y un Redivo que se enchufó desde el inicio.
Vaulet (sensacional sobre Shamell) y Whelan fueron dos valores interesantísimos en el fondo, anulando opciones en el dueño de casa y empezando a estirar de a poco la ventaja bahiense. Levy fue amo y señor de los primeros minutos, pero de a poco la tarea de Johnson empezó a tener un rubro apartado que fue sobresaliente en ambos costados (sobre todo anulando a Stallworth).
Generando pérdidas, corriendo la cancha y con frescura, Bahía se robó el primer capítulo por 25-13 enviando un fuerte mensaje a Mogi.
Mogi empezó a cargarse en faltas y eso sin dudas fue una preocupación extra, Bahía siguió gozando su momento en alza y la tarea de Johnson se intensificó hasta llevar a los argentinos a un clarísimo 34-20 restando cinco minutos para el descanso.
Pero Mogi mostró argumentos, de a poco creció y Bahía dejó de explayar su fantástico juego en el marcador. ¿Por qué? Porque a falta de Shamell apareció un soberbio Curnell que se cargó el equipo al hombro para encandenar una racha descomunal que puso al local abajo por apenas seis (37-31).
En el reinicio de las acciones el trámite cambió notoriamente. Bahía había dejado revivir a Mogi y los brasileños, empujado por su gente y por un par de pilares descomunales (Curnell estuvo imparable y se sumó un Jimmy cada vez mejor). Mogi mejoró en su ejecución, pero sobre todo en su confianza, poniéndole un clima picante al partido.
Bahía entró en cierto clima de nerviosismo, por algunas decisiones arbitrales discutibles (la parcialidad arbitral pitó mucho hacia el local) y porque Mogi siguió en ascenso. Para colmo de males llegó un susto porque Vaulet se dio un golpazo contra el piso, aunque el alero no tardó mucho en regresar a la cancha.
La presión se hizo presente, pero Bahía aguantó y terminó adelantándose por cinco (60-55) al terminar el tercer segmento. Levy, los aciertos de Redivo (metió dos bombas claves en momentos calientes) y Jasen anotando un doble revitalizante en el ocaso del cuarto le dieron aire a Bahía a diez minutos del cierre.
Bahía ingresó al último segmento con el duelo en suspenso. En ese momento se dio el regreso de un Vaulet aceitadísimo, con actitud y mucha ímpetu para encadenar tres jugadas consecutivas que le dieron a Bahía una ventaja de ocho (71-63). El trabajo descomunal de Johnson y Levy no se puede dejar de lado, mientras que el ingreso de Fjellerup dio un poco más de alivio.
Pero Mogi siguió apretando, con Caio Torres, Curnell y un peligroso Larry Taylor que venía de romperla la noche anterior. Los de Guerrinha levantaron el juego a puros bombazos, y justamente fue Taylor quien anotó un triple vital para dejar al dueño de casa abajo por un doble (74-72) restando 2m23s para el cierre del encuentro.
En el momento más oportuno Bahía empezó a asfixiarse, por faltas y porque Shamell estuvo fantástico desde la línea cada vez que la visitó. Mogi pasó al frente con su extranjero desde los libres, algo que no ocurría desde el primer periodo y poniéndose 78-77 a 30s del final.
Y entonces llegaron los minutos fatídicos para Bahía, no solo por los desaciertos arbitrales sino también por errores propios groseros como la pérdida de Johnson ante el acoso brasileño. Tampoco tuvo fortuna adelante, porque Bahía buscó una tradicional acción que se puede ver en la Liga intentando un triple de Redivo pero esta vez el tirador no tuvo éxito. Con pelotas divididas que tampoco lo favorecieron, Bahía terminó cayendo 80-77 y ahora deberá buscar una remontada heroica en lo que se avecina.
Lucas Leiva / [email protected]
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