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La temporada arrancó de manera irregular para Jeff Teague, quien entre lesiones se la pasó fuera de las canchas, yendo y viniendo por los pasillos de la enfermería de Minnesota Timberwoles. Sin embargo, al volver al rectángulo de juego notó que las cosas estaban marchando bien y el equipo por primera vez en mucho tiempo estaba en puestos de playoffs en la Conferencia Oeste, por lo que decidió que la formación debía mantenerse así.

"Andrew (Wiggins) estaba siendo genial", dijo Jeff Teague. "Estaba jugando como base y haciendo buenas cosas, por lo que yo quería que vuelva a esa posición", exclamó el veterano. Tras ello, se reunió con el entrenador Saunders para explicarle lo que sentía, ya que no había estado jugando bien por las múltiples lesiones sufridas en los últimos meses. 

"Hablamos acerca de los lugares en los que él se sentía cómodo", dijo el director técnico después de su conversación con Jeff y él sólo dijo: "Yo quiero ganar, estoy bien con el rol en el que ustedes me quieran poner". Al respecto, el coach destacó su forma de lidiar con la situación y expresó que sólo puede decir buenas cosas acerca de lo que ocurrió.

"Ese gesto demuestra la clase de persona que es", recordó Wiggins a todos, quien se encuentra viviendo una temporada de quiebre, con promedios de 25.2 puntos, 5.2 rebotes y 3.4 asistencias. Además, su punto de quiebre se encuentra en un cambio de estrategia individual, la cual está diseñada para que el canadiense evite tomar lanzamientos de media distancia y se decante por los triples y las penetraciones. De momento, sus porcentajes de tres puntos (34.2%) y de tiro verdadero (54.7%) le dan la razón.