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Si bien recién sabremos qué le deparará a cada equipo una vez que el torneo esté en marcha y las fechas vayan transitando, está claro que La Liga Femenina teje distintos pronósticos en la previa al torneo. Hablamos de distintas situaciones que, ya sea por conformación en sus planteles o la tradición que han tenido a lo largo de la historia, ponen a los equipos participantes con ciertos perfiles a la hora de arrancar la temporada.

En la antesala cabe mencionar un par de factores. La Liga puede fácilmente divirse en equipos que harán su primera excursión de índole nacional dentro de la rama, elencos que poseen un proyecto interesante desde hace un par de años y equipos que sobre sus hombros descansa una rica trayectoria. Desde ahí partiremos a ver cuál es la actualidad de cada uno, junto con sus jugadoras más destacadas y pretensiones. En este caso, repasamos el presente de los conjuntos del Norte, la conferencia donde más claras diferencias se ven entre los clubes candidatos (Berazategui y Obras), con respecto a aquellos conjuntos que estarán haciendo sus primeras armas.

DEPORTIVO BERAZATEGUI

Berazategui es uno de los equipos que en los últimos años ha pegado un envión fuertísimo a través de un proyecto. La idea no solamente es armarse bien, sino también apostar al futuro, nutriendo jugadoras de las inferiores, reclutando y dándoles la posibilidad de ir explotando en primera de a poco. Justamente eso es lo que lo ha puesto como uno de los equipos de lineamientos modelo, y que a pesar de que en esta edición abunda en cuanto a juventud (solo cuatro mayores) siempre resulta peligrosísimo.

Tranquilamente puede decirse que el equipo de Juan Ferreira tiene mucho del potencial nacional que se verá en el futuro. Luciana Delabarba (20 años), Florencia Chagas (15), Julieta Mungo (19), Martina Rodríguez (19), Agustina Leiva (20) o Julieta Giorgetti (20) son un ejemplo claro de esto que hablamos. Algunos podían creer que el equipo se debilitaría tras las salidas que se dieron en los últimos años (Boquete y Santana a Estrella, y este 2017 Castillo a Obras), pero claramente se equivocaron. Estas jóvenes que juegan como grandes tienen todo para liderar a un candidato como el Deportivo.

Por si fuera poco, Berazategui sumó dos refuerzos claves para su columna vertebral. Por un lado fichó a Macarena Durso que viene de romperla en los últimos años jugando para Vélez, y además firmó a Celia Fiorotto para tener más presencia en el juego interior. ¿Además? Dos de las mejores extranjeras salidas del draft: la base española Ana Suárez (brilló en La Unión de Charata en el 2015) y la alero estadounidense Lyndra Weaver, jugadora top.

HINDU

Hindú es uno de los equipos que incursionará dentro de la Liga Femenina a sabiendas que es una participación estreno a nivel nacional. Si bien ya hubo antecedentes de equipos chaqueños participando en torneos similares (La Unión de Charata por ejemplo), la realidad es que lo de Hindú resulta toda una apuesta desde el club como también desde las jugadoras que impondrá en cancha. Seguramente tendrá que pagar algo de su inexperiencia, pero a su vez no caben dudas que es un torneo que podrá curtir más a las jugadoras de la zona y las jóvenes que se sumaron como refuerzos.

El respaldo de Hindú estará en saber que la estructura del masculino es una experiencia que servirá como soporte, algo que deberá tener proyección y que (ojalá) se proyecte como una base firme dentro de los representantes del norte del país. Santiago Acuña, uno de los más conocedores del femenino de la zona, estará a cargo del equipo mientras que tratando de priorizar esta apuesta sobre el desarrollo de jugadoras lo primero que se ha hecho es un campus para reclutar talentos de la región. En ese orden fue sumando a jugadoras reconocidas como Aldana Duarte, Carla Scholles, Micaela Piazza o Jaqueline Barrios.

A ellas se fueron sumando otras jugadoras de distintos puntos del país, quienes no rindieron en el campus pero que sí se vieron seducidas por la oferta de jugar la Liga. Quizá acá es donde entremos en un plano mucho más conocido a nivel nacional por el recorrido que poseen a pesar de sus jóvenes edades, mencionando a Maribel Barzola como la cabeza de un grupo de refuerzos que se completa con Yanina Mercancini y Regina Carosio. Como extranjeras llegarán la española Irene Gari, la colombiana Tatiana Mosquera y la greco-nigeriana Jessica Ogunnorin, esta última llegando como reemplazo de Izabela Moraes.

OBRAS BASKET

Junto con Berazategui, indudablemente Obras es candidato para la Norte. Felizmente el resurgimiento del básquet femenino que ha tenido el histórico club capitalino en los últimos años ha ido dando pasos agigantados, y por tal motivo llega a esta liga sumergido dentro de una curva ascendente que ilusiona. No solo hablamos del maneja ejemplar que tiene como institución reconocida dentro de la Liga Nacional, sino de un equipo que dentro del femenino también ha sabido marcar una fuerte tendencia en los últimos tres años.

El equipo de Ignacio Narvaja no solo combina experiencia con juventud, sino que además tiene un plantel de muchísimo talento que ofrece una profundidad muy fuerte desde la rotación. Por si fuera poco se reforzó con tres buenas extranjeras desde el draft, lo que hace que sus posibilidades a priori aumenten aún más. Justamente en cuanto a las foráneas optó por seleccionar a Ariel Edwards (ala pivote estadounidense de 1.87), Regina Gómez (escolta española de 1.75) e Ineidis Casanova (base cubana de 1.70), quienes sin dudas le darán un salto de calidad mayor.

El equipo prácticamente no se ha modificado respecto a los últimos torneos, aunque sí hay que mencionar dos refuerzos de gran peso como Sofía Castillo (ex Berazategui) y Natalia Teodori (ex Vélez). Paula Reggiardo seguirá siendo la figura por referencia, por su condición de líder nata pero también por la referencia que impone a través de su experiencia y su visión del juego. Bárbara Landro y Belén Echeverría completan el cupo de jugadoras mayores, mientras que entre las U23 y menores que completan el equipo están chicas que absorberán buenos minutos como Sofía Aispurúa, Julieta Alé, Micaela Sabater y Melanie Fugellie.

OLIMPICO

Apoyado en la prestigiosa estructura que tiene dentro de la Liga Nacional, Olímpico es uno de los dos santiagueños que participarán de torneo femenino. Y será, al igual que su vecino, debutante a nivel nacional. Posiblemente sufra un poco la adaptación en este plano más grande, pero deberá saber que es el primer paso para generar cimientos e ir creciendo paulatinamente.

Siguiendo ese orden, la apuesta a jugadoras locales que ha hecho José Small está orientada a pibas muy chicas. Acá tenemos el caso de jugadoras como Agostina Leguizamón, Rocío Iturre o Verónica Ibarra, a las que se suman otras bandeñas como Aldana Bertero, Maytena Cancino, Virginia Pacheco o Rut Mentesana. Hablamos de jugadoras que no superan los 21 años, lo que le baja la media de edad a un equipo que ya de por sí es bastante joven hasta en sus refuerzos.

De hecho las jugadoras más grandes de edad y de experiencia son la alero riojana Daniela Gómez Sara (31), la ala pivote entrerriana Johanna Puchetti (29) y la base paraguaya Jazmín Mercado (27). Justamente las tres fueron refuerzos que firmó Olímpico para rodear a su equipo de jóvenes, sumando también a la alero catamarqueña María Acevedo y dos ex Banda Norte de Río Cuarto como la base Camila Berardi (23) y la pivote Candela Ruffino (22). Dentro de las ventajas que ha tenido a la espera del arranque del torneo, el Negro bandeño fue uno de los pocos que pudo entrenar con dos de sus extranjeras con varios días de anticipación: Emily Ben Jumbo y Laura Aliaga. Quien todavía no se ha sumado es Ashley Ezeh

QUIMSA

Siguiendo la línea del otro representante santiagueño, Quimsa también ha optado por apostar a un equipo sostenido por varias figuras de peso pero sin dejar de hacer hincapié en el desarrollo de jugadoras locales. Proyecto interesante el que se están planteando estos tipos de equipos pensando a futuro, no solo por lo importante que será fomentar más el básquet en la provincia sino porque también eso podría ampliar la base de acá a unos años. Dependerá de la inversión y el trabajo que se lleve a cabo.

La Fusión ha logrado armarse bastante rápido, de hecho fueron uno de los primeros equipos que prácticamente cerró sus incorporaciones. Como mayores locales aparecen María de los Angeles Avila y Elsa Battan. Como refuerzos concretó las llegadas de la experimentada rosarina Natalia Ríos (ex Rocamora), la joven banderense Agostina Ledesma (ex Vélez), la riojana Julieta Tell (ex San Martín y Banco Mendoza) y la mendocina Gabriela Herrera (también ex Banco). Con esto sin dudas que logró potenciar mucho su juego exterior, desde jugadoras con experiencia pero que también pueden ayudar a liderar el grupo de jóvenes de forma positiva, con pibas como Milagros Basualdo, Emilia Rojas, Lorena Campos, Patricia Galván, Julieta Valoy o Lucía Boggetti.

Y seguramente que el refuerzo top de Quimsa no dejará de ser Gisela Vega. La entrerriana es toda una referencia y posiblemente sea la interior nacional que más provecho pueda sacar en su juego. Viene de una temporada donde cambió equipos entre Gipuzkoa (8.1 puntos y 10.2 rebotes) y el Araski (5.4 puntos y 3.6 rebotes), nadie duda de su capacidad aunque llamativamente estará algo solitaria en este Quimsa ya que es la única pivote natural del equipo. En cuanto a centímetros deberá darle una mano la española Itziar Germán, que se desempeña más como ala pivote y que llegó como reemplazante de Bineta Ndoye. A Vega (franquicia) y Germán (extranjera), la otra foránea que completa el máximo de permitidos es la zaragozana Estela Royo, completando el tridente de experimentadas encargadas de liderar a este Quimsa.