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David Fizdale no se tomó el trabajo de ocultar su furia con el arbitraje, luego de la derrota ante San Antonio en el segundo punto de la serie entre Grizzlies y Spurs. El entrenador mostró enérgicamente su disconformidad con la disparidad en intentos de tiros libres y calificó la actuación de los jueces como "poco profesional".

Como se podía esperar ni bien comenzó Fizdale con su discurso, la multa de la NBA no tardó en llegar: 30 mil dólares, una cifra que teniendo en cuenta la severidad de los dichos del DT, hasta parecía poco (en comparación con otras multas que ha impuesto la competencia).

De todas maneras, por estas horas se confirmó una buena noticia para el bolsillo del entrenador: no tendrá que pagar los 30 mil dólares, sino que sus propios jugadores se harán cargo de ese dinero.

El mensaje es claro: el plantel entiende que el técnico sacó la cara por ellos y ahora hacen lo propio con el ex asistente de Miami. La gran pregunta que queda en el aire, ¿qué impacto tendrá la situación en los árbitros, cuando este jueves Memphis y San Antonio vuelvan a verse las caras?