Basquetplus.com

Kyrie Irving no pudo ocultar su alegría al regresar al lugar familiar que había estado desesperado por presenciar. Hablando ante los medios después de que él y Dallas Mavericks aseguraran su boleto a las Finales del Oeste en el juego 6 contra Oklahoma City, Kyrie recordó con cariño su viaje de vuelta a la contienda y acercarse más al campeonato.

"Tuve que hacer un discurso improvisado y tuve que hacer mi mejor esfuerzo para no dejar caer algunas lágrimas," dijo Irving. "Siento que ha sido un largo camino para volver a estar en esta posición, regresar a las Finales de Conferencia. Ha sido un largo camino de vuelta. Cuando miro atrás a partes de mi carrera donde lo daba por sentado, solo llegar a las Finales de Conferencia tres veces seguidas y luego no volver por un tiempo, eso pesa sobre ti como competidor."

El proceso ha sido verdaderamente humilde y gratificante para Kyrie, considerando los altibajos que ha atravesado solo para llegar a esta etapa nuevamente. Disfrutó al máximo su tiempo con los Cleveland Cavaliers, donde llegó a tres Finales de la NBA consecutivas y ganó el campeonato en 2016. Pero en el verano de 2017, anunció sorprendentemente su intención de ser traspasado, con la esperanza de convertirse en el hombre principal fuera de la sombra imponente de LeBron James.

Kyrie llegó a Boston Celtics, desafortunadamente, no estuvo a la altura y falló en los momentos cruciales como líder del equipo joven de los Celtics, y su carrera se desmoronó después de dos temporadas de decepción. La turbulencia se extendió cuando se unió a su equipo de la ciudad natal, con Brooklyn Nets. A pesar de formar un tándem estelar con Kevin Durant, sus grandes sueños de ganar un título no se materializaron en tres temporadas y media. 

El movimiento de Kyrie a Dallas le proporcionó la paz y estabilidad que necesitaba para superar su tumultuosa historia, como se evidenció tanto en su juego como en su vida fuera de la cancha. Este renacimiento gratificante con los Mavs ha dado sus frutos, acercándolo unos pasos más a ganar su segundo campeonato.

"Estoy agradecido de tener a estos muchachos a mi lado y seguir dándome confianza y haciendo pequeñas cosas el uno por el otro," dijo Kyrie sobre sus compañeros de equipo. "Eso hizo que la celebración se sintiera mucho mejor." El trabajo no está terminado aún para él ni para los Mavs. Pero Kyrie ciertamente se ha ganado el derecho a celebrar su progreso individual y de desarrollo, lo que le ayudó a redescubrir su estado legítimo como una de las estrellas más brillantes de la liga después de años de desilusiones, decepciones y controversias.