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Con el juego de esta noche entre los Lakers y Kings, se celebran oficialmente dos décadas desde que LeBron James pisó por primera vez una cancha de la NBA. El Rey hizo su debut profesional hace 20 años en un partido fuera de casa, irónicamente contra Sacramento, y el mundo entero pudo presenciar el nacimiento de, quizás, el mejor jugador de toda la historia.

LeBron sin duda se convirtió en el jugador de secundaria más promocionado en la historia del deporte, y posiblemente el prospecto amateur más intrigante en la historia de toda la NBA. LeBron se presentó en la liga con una actuación contundente que dejó claro a todos que había llegado para quedarse en el centro de la escena por mucho tiempo.

LeBron inició el juego con un alley-oop. Luego encestó múltiples tiros en suspensión y dejó una tremenda volcada con la derecha en una jugada rápida tras robar una pelota en primera línea. Y solo segundos después, le robó el balón a Doug Christie, recibió un pase de campo completo de Carlos Boozer y dio una asistencia de lujo cuando parecía que no tenía opciones.

A pesar de la derrota de los Cavs esa noche, LeBron terminó con 25 puntos, 9 asistencias, 6 rebotes, 4 robos y solo 2 pérdidas de balón. LeBron fue considerado “El Elegido” por una razón. Dos décadas después, es el máximo anotador de todos los tiempos de la NBA. Campeón en cuatro ocasiones, MVP de las Finales y MVP de la liga. Diecinueve selecciones en el All-NBA. Diecinueve veces All-Star y tres veces MVP del All-Star. Seis selecciones en el equipo defensivo. Novato del Año en la temporada 2003-04. Campeón anotador en la temporada 2007-08. Líder en asistencias en la temporada 2019-20 y miembro del Equipo del 75 Aniversario de la NBA como su hito más reciente.