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Luca Vildoza, parece estar enfrentando una fase desafiante en su trayectoria en la Euroliga. Sus actuaciones recientes muestran una disminución en el tiempo de juego. A pesar de los esfuerzos del Panathinaikos en la Euroliga, sus últimos encuentros han destacado el tiempo limitado en cancha para Vildoza, promediando menos de 8.5 minutos por partido en los dos últimos enfrentamientos. Esta estadística contrasta notablemente con la profundidad y el talento que posee el equipo en las posiciones de base.

La llegada de Vildoza al Panathinaikos se vio afectada por una lesión en la pretemporada, obstaculizando su integración en el equipo. Sin embargo, sus apariciones posteriores mostraron destellos de su potencial, contribuyendo notablemente con un promedio de 12.5 puntos y 3 asistencias en juegos cruciales contra Fenerbahce y Maccabi.

La reciente irrupción de Kendrick Nunn, coincidió luego con un notable declive en la participación de Vildoza, especialmente evidente en los dos últimos enfrentamientos decisivos. En un total de 85 minutos en los partidos contra Partizan y Anadolu Efes, Vildoza jugó aproximadamente 16 minutos y medio. En contraste, Nunn ha acumulado 55 minutos y un cuarto durante el mismo período.

Las decisiones estratégicas del entrenador Ergin Ataman han favorecido la integración de Kendrick Nunn, marginando involuntariamente a Vildoza, quien parece haber perdido protagonismo en el circuito europeo, lo que representa una preocupación para el base de 28 años en cuanto a su papel futuro dentro del equipo.

En sus primeras 12 apariciones en la Euroliga, Vildoza ha mantenido un tiempo promedio de juego de poco menos de 18 minutos, mostrando una disminución notable en comparación con sus etapas anteriores en Baskonia y Estrella Roja de Belgrado. Por el contrario, en la Liga Griega, Vildoza disfruta de un tiempo de juego promedio relativamente más alto, de aproximadamente 23 minutos por partido, lo que indica un escenario contrastante en las competiciones domésticas.