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Si tenemos que hablar de unas de las leyendas del básquetbol argentino, este es sin dudas Oscar Furlong. Nacido en Capital Federal un 22 de octubre de 1927. Su padre, periodista, también fue miembro fundador del club Gimnasia y Esgrima de Villa del Parque y allí empezó a mostrar sus atributos en todos los deportes que disputó.

Quienes tuvieron la fortuna de conocerlo, desde joven se sabía que era dotado para la práctica de deportes. Siempre con el básquet como bandera, Pillin también practicó tenis, natación y waterpolo. Eso sí, jamás tocó una pelota de fútbol. A los 15 años demostró sus habilidades en el tenis anotándose en el Campeonato de la República y llegó a la definición del cetamen. Pero él solo se anotó para conseguir entradas para los partidos de sus jugadores estadounidenses favoritos.

Oscar Furlong tuvo un tempranero debut con la camiseta de Gimnasia y Esgrima de Villa del Parque en la categoría cadetes, aproximadamente a los 16 años. Se generó un hueco en la plantilla del equipo porteño y Pillín entró como suplente. Era un partido importante ante Ñandú y Furlong la rompió toda con 27 puntos. Fue la figura de su equipo y además con esa gran actuación, permitió que Gimnasia ascendiese a la máxima categoría del básquetbol argentino.

Con Furlong a la cabeza, Gimnasia de Villa del Parque ascendió al torneo de primera división de la vieja Federación Argentina de Básquet y lograron diez campeonatos seguidos. Una gran base de ese plantel nos representó Londres en los Juegos Olímpicos de 1948, donde no realizaron un buen papel pero se dieron el lujo de hacerle un gran partido a Estados Unidos y perder por tan solo un doble.

Tras esos Juegos Olímpicos, a Oscar Furlong le llegaron varias propuestas de equipos de la NBA. La más resonante de todas fue la propuesta de Minneapolis Lakers, pero rápidamente fue rechazada. Pese a eso, Pillín tuvo un paso por la Universidad de Dallas.

Dos años después llegó la gran gesta de la primera generación exitosa del básquet argentino. En el mundial de Argentina en 1950, el seleccionado nacional se consagró campeón en el Luna Park luego de vencer en la final a Estados Unidos por 64-50. Furlong fue la gran figura del partido con 20 puntos, finalizo como MVP del torneo e integró el quinteto ideal con su compañero y amigo Ricardo González.

La supremacía argentina en esa época en cuestiones deportivas era total. Tras el mundial de 1950, también en Argentina se realizó la primera edición de los Juegos Panamericanos, con sedes en cancha de River y Racing. Este dato no es común hoy en día, pero la delegación argentina lideró el medallero en ese torneo, consiguiendo un total de 154 galardones, 68 de ellas medallas doradas. El equipo de básquet nacional, con Furlong a la cabeza, también se quedó con el segundo puesto en la edición de 1951 y 1955.

En el 53 Furlong actuó de si mismo en la película En cuerpo y alma, dirigida por Leopoldo Torres Ríos. Narraba la historia de dos jugadores de básquet que se pelea por el amor de una mujer.

Luego del conflicto, que tanto Furlong como toda la generación del 50 tuvieron con la Revolución Libertadora, donde los acusaron por recibir premios como jugadores profesionales (cuando no lo eran), Pillín continuó cerca de su otro amor, el tenis. Tan importante fue para el deporte nacional, que fue capitán del equipo de Copa Davis entre 1966 y 1977. En su último año, su equipo tuvo una buena actuación y llegó a semifinales. En esa oportunidad, le tocó caer ante Australia por 3 a 2.

Desde su último paso como capitán de la Copa Davis llegaron los reconocimientos para Furlong. En 1980 recibió el Premio Konex de platino por ser el basquetbolista más importante del país hasta la fecha, y en 2007 pasó a integrar el Salón de la Fama de FIBA. Oscar Furlong falleció el 11 de junio de 2018 y su recuerdo quedará marcado a fuego en la rica historia del deporte nacional.