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George Gervin es uno de los jugadores más icónicos en la historia de los San Antonio Spurs. Con 12 temporadas jugadas para la franquicia (ABA y NBA), es uno de los superestrellas más memorables de la década de los '70, conocido por su característico movimiento del "finger roll” que ha perdurado en el tiempo.

Recientemente, el legendario "Iceman" habló con Yahoo Sports y reveló que tuvo la oportunidad de unirse a los Lakers cuando le tocaba firmar una extensión con los Spurs. Sin embargo, su objetivo no era unirse al equipo de Los Angeles, sino derrotarlos.

"No me arrepiento en absoluto. Vengo de una época en la que amaba competir y enfrentar desafíos. Angelo Drossus, el propietario de los Spurs, se acercó a mí antes de que firmara un contrato y dijo: 'Los Lakers están ofreciendo tres selecciones de primera ronda por ti, y la decisión es tuya'. Yo respondí: 'No quiero jugar con los Lakers; quiero vencer a los Lakers'".

Gervin jugó en una época en la que cambiar de equipo y formar superequipos ni siquiera eran opciones. En la NBA de su tiempo, las superestrellas buscaban competir entre sí en lugar de unirse. "No creía en ganar a toda costa porque, al final, es solo un juego. Cuando todo está dicho y hecho, si tuvieras la oportunidad de hacerlo todo de nuevo, ¿lo harías? Yo dije: '¡Oh, demonios, no!'", concluyó.

La ilustre carrera de Gervin abarcó un total de 10 temporadas en la NBA, durante las cuales vistió las camisetas de los San Antonio Spurs y los Chicago Bulls. A lo largo de este notable recorrido, Gervin exhibió una extraordinaria habilidad para encestar la pelota, ostentando un impresionante promedio de carrera de 26.2 puntos por partido. Más allá de su destreza anotadora, contribuyó significativamente a sus equipos con 4.6 rebotes y 2.8 asistencias por partido, demostrando una versatilidad que iba más allá de la simple producción de puntos.