Joe Dumars, la pesadilla reconocida por Michael Jordan
12:23 19/12/2021 | El escolta de los Bad Boys de Detroit tuvo una carrera muy exitosa en contraposición a lo que poco se habla de él. Fue una Kryptonita para Su Majestad y este así lo aseveró.
Los equipos se hacen de distintos componentes, están las figuras, los jugadores de rol y los especialistas defensivos, aquellos necesarios si o si para conseguir cosas importantes. Detroit tuvo eso y mucho más con Joe Dumars, quien era un acérrimo defensor de los mejores jugadores rivales y una mano derecha intachable para Isiah Thomas en ese perímetro bien picante que tenían los Pistons.
Joe estuvo ligado a Detroit como jugador durante toda su carrera y fue ayudó a la franquicia a conseguir dos estrellas a fines de los noventa con los recordados Bad Boys. Si bien, Dumars repartía bastante en aquella NBA bien física, su personalidad poco exentrica nunca lo ponía en el ojo de la tormenta o quizás podía ser tomado como el más “buenos” de Detroit. Su función era parar a Jordan cuando enfrentaban a Chicago y como si no le costará nada, si lo dejaban metía unos 20 puntos como quien no quiere la cosa.
Llegó a ser el MVP de las finales de 1989/90 donde los Pistons barrieron a los Lakers y Joe promedió 22.3 puntos con 6.0 asistencias. En la final de conferencia, Detroit volvió a luchar con Chicago y allí promedió 13.4 puntos, dado que sus piernas estaban destinadas para frenar a Michael Jordan, quien por ejemplo en esos playoffs, ante Cleveland en primera ronda había promediado 30.9 puntos y en semifinales, ante New York tuvo una media 31.8. Con la defensa de Dumars y un trabajo colectivo, por momentos muy excesivo en físico, los Pistons bajaron la cantidad de puntos del 23 a 21.2 en la final del Este, clave para acceder a la definición por el título.
Está cuestión fue soslayada por Jordan, quien se refirió a Dumars como uno de los mejores que tuvo enfrente y que lo obligó a mejorar. “Pensó bien y fue muy inteligente con su defensa. Creo que se acerca al juego tratando de analizar a sus oponentes y tratar de encontrar debilidades o tratar de obligarlos a hacer cosas con las que no se sentían cómodos. Introdujo ciertos trucos para hacerme expandir mi talento como jugador ofensivo, y por eso lo considero uno de los mejores”.
Dos títulos, un trofeo MVP de mejor jugador de finales y el intangible de que Michael Jordan te considere uno de los mejores defensores a los que se enfrentó, todo eso es Joe Dumars, el hombre que hizo un culto del perfil bajo, dentro y fuera de la cancha.
No importas cuando leas esta nota, Joe Dumars va a estar siendo infravalorado y su reconocimiento siempre llegará con cuenta gotas.