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Flamengo comenzó esta temporada de la Basketball Champions League Americas como uno de los máximos candidatos a quedarse con el campeonato por una cuestión de rendimiento y de fortaleza de su plantel. Ganó los cuatro partidos de la fase de grupos y despachó a sus rivales en cuartos y semifinales sin perder un sólo encuentro. Con el parate por la pandemia del Coronavirus, tuvo tiempo para sumar tres nuevos nombres a su plantilla como refuerzos.

El más conocido en la Argentina es Luciano González. Chuzito será el segundo nacional en una plantilla que ya cuenta con la presencia de Franco Balbi, el líder del conjunto de Rio de Janeiro. Llegó proveniente de San Lorenzo luego de un paso corto y posterior a su experiencia en Instituto de Córdoba, dos equipos que jugaron la BCLA y se quedaron afuera en series previas. Su impacto en la media cancha está estrictamente relacionado con su capacidad de anotación y su facilidad para generar desde el perímetro con el triple. El escolta pasó por Quimsa en la temporada 2016/17 de la Liga Nacional.

Yago Mateus es el otro perimetral que arribó a Flamengo en estos últimos meses. El base brasilero pertenece al seleccionado de ese país, tiene 21 años de edad y es considerado una de las grandes revelaciones de su camada. Caracterizado por su explosividad y su buena visión de juego, se ha unido al Fla tras salir del equipo en el que estuvo desde que debutó en 2016: Paulistano. En la última edición de la NBB, promedió 16 puntos, 3 rebotes y 5,4 asistencias por encuentro.

El último refuerzo ha sido Rafael Hettsheimeir, experimentado veterano que también forma parte del combinado nacional de Brasil. Tiene 34 años y una larga trayectoria a nivel internacional, que le ha permitido vestir los colores de Real Madrid, Unicaja, Zaragoza, Obradoiro y Fuenlabrada, entre otros. Su último equipo había sido el Franca. De esta manera, el juego interno del Flamengo se ve fortificado por la presencia de un pivote con muchas batallas en su pasado.