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El Draft de la NBA se realizará el próximo 20 de junio en el Barclays Center de la ciudad de Nueva York y las franquicias no quieren dejar librado al azar en una noche que puede cambiar el futuro de los equipos. Por eso, estudian exhaustivamente a cada uno de los jugadores elegibles evitando encontrarse, entre otras cosas, con lesiones en ellos. Para evitar problemas físicos más importantes, dos prospectos proyectados dentro del Top 10 deberán operarse.

Los jóvenes en cuestion son Ja Morant y Cam Reddish. El base que jugó en la NCAA para Murray State y posible pick 2 se realizará una artroscopía en su rodilla. No es un procedimiento complicado pero la zona es delicada para los deportistas. Su recuperación le demandará entre 3 o 4 semanas, tiempo que no le impediría comenzar la próxima temporada con su nuevo equipo.

En el caso de Cam Reddish la intervención será por una hernia, que arrastró durante este último curso en Duke al lado de Zion Williamson. 6 semanas es el tiempo que le demandará la recuperación a uno de los jugadores proyectados dentro del Top 10. A pesar de ser intervenciones poco complicadas y en busca de evitar lesiones graves en el futuro, serán tenidas en cuenta por las franquicias al momento de seleccionarlos.