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Gaby Fernández le puso punto final a una carrera profesional gloriosa, en la que pudo conseguir lo máximo a lo que puede aspirar un jugador FIBA: una medalla dorada, sumada a una trayectoria más que importante a nivel clubes, tanto en la Liga Nacional como en Europa. Para recordar esto y conocer sus primeras sensaciones como exbasquetbolista, hablamos con el interno de Burzaco.

- Con qué sensaciones estás en estos primeros días después de oficializar el retiro, más allá de que era algo que ya tenías en claro desde hace algún tiempo que iba a suceder.

. Bien, porque ya me ha tocado estar en esta situación. Es la segunda o tercera vez que decido parar de jugar o retirarme. Por ahí esta vez es a mayor edad y hay menos posibilidades de volver. Creo que es lo que va a pasar, es definitivo. Pero bien, estoy contento por la carrera que hice. Cada vez que me retiré, fue un desafío volver y estar al nivel. Es un desafío que me gusta y siempre lo disfruto cada vez que pasó. Cuando volví a la Liga, cuando estuve algunos meses sin jugar y después volví en el Torneo Federal. Siempre lo disfruté y en este momento también, porque estoy pensando qué voy a hacer a nivel deportivo. Voy a seguir tratando de pasarla lo mejor posible.

- ¿La decisión pasa por un tema de ganas, un tema físico, un poco de ambas cosas?

. Mirá, la verdad que pasa por un tema de que jugué todo el Federal pasado, haciendo las dos funciones: dirigente y jugador. Fue como una especie de maratón, haciendo todo a la misma vez. Fue desgastante. Además después del Federal tuvimos que jugar la clasificación, que el año pasado no la habíamos jugado porque habíamos hecho el piso de la cancha. Fue una gran exigencia y un gasto muy grande a nivel económico, en lo personal y a nivel club. Jugamos el Prefederal y clasificamos para estar entre los cuatro primeros. Cumplimos el objetivo, en un torneo que tiene un mayor nivel que el Federal, porque al estar parada la Liga, hay jugadores de ese torneo o del TNA. Estoy contento por haber jugado el Final Four de vuelta y estar ahí con posibilidades de jugar de nuevo el Federal. Ahora si va todo normal, seguiré como dirigente solamente.

- Ya te había tocado estar alejado del básquet y sumando aquello con lo que estás viviendo ahora, ¿se extraña la competencia o sos capaz de cerrar esa etapa rápido, sin mirar atrás?

. Siempre se extraña. Siempre sentís como que algo te falta o algo no estás haciendo. Porque todos los fines de semana tenías un partido, un desafío nuevo, un examen que tenés que rendir bien. Prepararte durante la semana, descansar. Todo el tema de la alimentación. Igual hay un montón de cosas que las voy a seguir haciendo, porque ya las tengo incorporadas a mi vida. Voy a seguir entrenando. Pero bueno, no voy a seguir jugando y eso va a cambiar radicalmente mi vida. Voy a tener más tiempo y esa energía hay que aprovecharla en otras cosas.

- ¿Cuál es tu idea para el corto plazo, sobre todo con tu proyecto en Burzaco?

. Estoy replanteándome también varias cosas. La posibilidad de jugar el Federal se va a definir entre mañana y pasado y después veremos. Los clubes chicos son muy políticos. Muy políticos. Yo empecé con muy buena fe dentro del club, pero hay gente adentro que tiene miedo que por ahí uno quiera ser presidente o que siga ascendiendo. Pero a mi lo único que me interesa es el básquet y nada más. No me interesa ser presidente del club, porque lo que quiero es permanecer dentro de la dirigencia del básquet. No quiero ser presidente, pero tampoco quiero que me tomen como una especie de sponsor, que genera cosas adentro del club y después ellos te descartan cuando quieren. Hoy estoy en una situación un poco extraña dentro del club, donde por ahí estoy siendo un poco maltratado. Tengo que ver si me sigo bancando eso, tirando para adelante como hecho siempre. Todo a pesar de que es mi club. El club del que salí. Pero está manejado por personas que no son las mismas que estaban cuando yo arranqué.

- ¿La decisión de jugar el Federal pasa por vos o por la dirigencia del club?

. El hecho de jugar el Federal va a ser todo coordinado por mi. Después hay que ver cuántos ascensos vamos a tener por haber jugado el Prefederal. Si son cuatro o tres. Estamos viendo si podemos jugarlo. Esperamos que FeBAMBA y la CABB terminen de coordinar esa parte. Ya depende de ellos, se está coordinando. Todos los años se coordina para ver qué clubes ascienden y generalmente son los que llegan al Final Four.

- Imagino que debe ser muy desgastante estar al frente de un proyecto y además participando como jugador. En ese sentido, ahora vas a estar algo más tranquilo.

. Me siento más aliviado porque no voy a jugar, pero me gustaría que haya otra coordinación con los dirigentes del club. Que entiendan que yo no tengo aspiraciones de ser presidente, solamente quiero que el básquet siga progresando y ayudar en lo que pueda para el club también. No tengo ninguna otra idea. Veremos cómo se define la cuestión del Federal y después cómo se acomoda adentro del club. Yo pensé que estaba todo ya claro. Hoy tengo el permiso para jugarlo, pero hay cosas que no se entienden y que me gustaría que estén mejor.

- Mirando un poco para atrás en tu carrera, obviamente que Atenas 2004 siempre se va a destacar. ¿Es el momento por encima de cualquier otro o le agregás algún otro recuerdo cuando pensás en lo que has vivido como jugador?

. Mi carrera por ahí la divido en tres partes. Primero la parte de ganarme un lugar en la Liga Nacional, después afianzarme en Europa, pudiendo jugar a un alto nivel en Italia, siendo figura de una liga fuera de Argentina. Eso fue muy importante. Y después la otra parte, que es la selección, donde cumplí todos los sueños. Salí campeón olímpico y más que eso no podía pedir. Ganarle a Estados Unidos, ser parte de ese equipo. Para mi el sueño nunca fue jugar en la NBA, sino jugar en la selección y en Europa. Lo pude cumplir. Contento por haber cumplido los objetivos.

- ¿Donde se vio al mejor Gaby Fernández?, ¿en Varese?

. Mi mejor versión se vio en Varese, sí. Lamentablemente fue después de haber renunciado a la selección, donde ahí me recrimino por haber cometido un error. En ese momento no estaba bien, tenía mal el tendón de Aquiles de las dos piernas. Fue algo que después pude solucionar, con trabajos y elongación después de los entrenamientos. Pero lo descubrí años después y desapareció. Son cosas que venía arrastrando y en ese momento tuve que parar antes de Las Vegas. Eso me hizo quedarme afuera de la selección y desde ahí fue una carrera para poder volver a estar con mi grupo de amigos, con el grupo con el que había estado siempre, ya en una edad mucho más avanzada, arriba de los 30 años. No era fácil. Mi vuelta a Argentina tuvo mucho que ver con mostrar mi nivel. Empecé a jugar en Buenos Aires para estar cerca de mi familia, que ya no se quería mover más. Imaginate lo que es la vida de un deportista, estar mudándose de cada ciudad. Eso por ahí hizo que baje el nivel con el correr de los años y no pude volver a la selección. Fue un error. Pero sí, en Varese y en mi primer año en Boca creo que estuve en mi mejor momento, sin estar en la selección. Fue una lástima, porque lo podía haber aprovechado.

- Igual imagino que más allá de eso, no te habrán quedado demasiados cuentas pendientes.

. No, solamente es un detalle. Yo podía haber seguido mi carrera en Europa y es la razón por la que volví a Argentina. Estaba en mi mejor momento, pero decidí volver. Justo se dio la casualidad además de que el equipo tenía un momento económico malo e Italia estaba entrando en una crisis como país. Me vuelvo a Boca, que venía de salir campeón y llegué a un equipo con algunos problemas internos. Estábamos 11 en la tabla y terminamos primeros la fase regular. Después en los playoffs no nos fue bien, pero estaba en un gran momento. Llegué espectacular de Europa.

- Sos obviamente palabra autorizada para hablar de la selección, con la cual conseguiste lo máximo. ¿Cómo ves hoy al equipo y su futuro?

. El recambio en la selección se sintió, fue duro, pero estamos un escalón arriba de lo que creíamos todos. Me parece que el equipo está mejor de lo que se pensaba. Eso es bueno. Los jugadores que están agarrando la selección hoy, están con muchísima confianza y jugando en equipos importantes de Europa. Quizá veamos más rápido de lo que creíamos a la selección en su mejor versión, al 100%. En un par de años vamos a estar con la mejor selección posible, con jugadores como Delía, Campazzo, Laprovittola. Hay varios que están subiendo de nivel en Europa y hoy le pueden aportar a la selección un montón de cosas parecidas a las que pasaron durante la Generación Dorada. Hoy la selección está un par de escalones arriba de lo que parecía iba a estar. Eso no es para nada malo. Veremos cómo nos va en las competencias importantes. Todavía no llegamos a los torneos donde hay que jugar contra las potencias. Estamos jugando a nivel local, para clasificar, que no es fácil. Hay un diseño nuevo de campeonato y veremos cómo nos va. El examen final va a ser cuando juguemos un Mundial o un Juego Olímpico.