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Desde hace un tiempo que se viene especulando con la posibilidad de que el pivote Larry Sanders regrese a la actividad y más precisamente, se inserte de lleno en algún plantel NBA. ¿Cuál es la particularidad del caso? El ex jugador de los Bucks está retirado desde el 2015.

Tras dar positivo en febrero de ese año por marihuana, Sanders anunció que dejaba el básquet porque ya no encontraba la motivación o el interés para seguir jugándolo. La noticia fue una verdadera sorpresa, teniendo en cuenta que era apuntado como uno de los buenos pivotes jóvenes de la competencia.

Más allá de que ofensivamente nunca fue un talentoso (6,5 puntos en su carrera), Sanders era de los mejores defensores de la competencia, al menos en su posición. En la 2012-13, por ejemplo, llegó a promediar 2,8 tapas por partido, siendo el segundo promedio más alto de dicha campaña.

Ahora, tras dos años de estar afuera de las canchas, Sanders está de regreso y así lo confirmó en su Twitter: "Oficialmente regresando al juego. Estoy buscando un buen escenario, pero no debería llevarme demasiado tiempo. Realmente extraño el juego y creo que él también me extrañó a mi". ¿Confiarán en él los equipos NBA?