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Trae Young debutó en los playoffs de la mejor manera que cualquier jugador soñaría: ganando, en el Madison Square Garden, rompiéndola toda y metiendo el tiro del triunfo en la última pelota. Todo eso le pasó al base de Atlanta, que además sumó 32 puntos, 10 asistencias y 7 rebotes. Memorable. 

Young, además, no esquivó el cruce con los hinchas de los Knicks, que se sabe son de los más heavy de la NBA. Incluso lo reconoció en la entrevista post partido. Que todos los insultos del público lo motivaron para jugar mejor. Y eso incluyó gestos claros hacia la gente. 

Pues bien, los fans de los Knicks encontraron el punto débil de Trae: los pájaros. Resulta que el jugador de los Hawks sufre Ornitofobia, que es ni más ni menos que fobia a las aves. Jugando para Oklahoma, al equipo le tocó visitar Nueva Zelandia y Australia y allí el jugador lo reconoció, cuando se escondía ante el vuelo de las palomas cerca del ferry que los llevó a conocer la famosa Opera House de Sydney. 

¿Irán los fans de los Knicks con alguna estrategia que tenga que ver con remeras con pájaros o algo similar? Existe un antecedente no demasiado favorable. En enero de 2018, luego de conocerse la fobia de Trae, jugaban el clásico entre Oklahoma y Okahoma State. Típico del ambiente estudiantil, los colegiales rivales de Young llevaron carteles haciendo alución a pájaros.
 

We see you, #okstate students. pic.twitter.com/jF3oKKkC8Y

— O'Colly (@OColly) January 20, 2018

Young era la estrella indiscutida de Oklahoma y de toda la NCAA. Por eso, cuando al final del primer tiempo, si bien llevaba 14 puntos, había tirado solo 4/15 de campo, pensaron que la acción había dado buenos resultados. 

Sin embargo, el jovencísimo Trae jugó una segunda mitad espléndida y llevó el partido a suplementario, anotando en total 48 puntos. Eso sí, perdieron 83-81 el clásico. ¿Tomarán este ejemplo los fans de los Knicks o buscarán ganarlo jugando mejor básquet? Necesitarán ambas cosas, como mínimo.