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Hace 54 años, Matt Guokas Jr. debutó en la NBA y completó así la primera ocasión en la que un combo de padre e hijo tenía minutos en la competencia. Matt Sr había jugado en los años cuarenta con los Philadelphia 76ers, equipo por el que también pasó su hijo, y en ese momento era uno de los periodistas deportivos que cubría el encuentro. ¿Cuántas veces volvuió a ocurrir? Lo repasamos.

En total, 89 duplas de padre-hijo han tenido participación en la competición estadounidense desde ese entonces. La curiosidad que rodea a los Guokas es que ambos conforman el primer dúo en ganar al menos un campeonato del torneo por cabeza. Rick Barry y su hijo Brent fueron los segundos y Bill y Luke Walton, los terceros. En esa familia también debutaron Drew y John. No son los únicos que tienen múltiples casos en el mismo seno familiar: Mychal Thompson tuvo el orgullo de que tanto Klay como Mychel pudieran disputar juegos en alguna franquicia.

Pasó exactamente lo mismo con Dell Curry y sus hijos Seth y Steph, quizás el protagonista del caso más exitoso en términos de comparaciones entre las carreras de los miembros de la dupla. Los otros conjunto sque se ajusta a esos parámetros son el de los Paxson y el de los Grant: Jim Sr., Jim Jr. y John por un lado, Harvey, Jerian y Jerami por el otro. Todos los demás casos refieren a vinculaciones únicas entre un padre y un hijo en particular.

Kobe Bryant no fue el primero de su árbol genealógico en sumarse a la competencia: Joe ya había jugado para Philadelphia 76ers y sentó las bases de lo que luego sería el dominio del fallecido exescolta, quien se coronó como campeón en cinco oportunidades y marcó un antes y un después desde su llegada. En la actualidad, jugadores como Devin Booker, Jalen Brunson, Jae Crowder, Tim Hardaway Jr, Austin Rivers y Darius Garland tienen un padre que participó de la NBA. El último en sumarse a ese selecto grupo es Bol Bol, hijo del emblemático Manute.