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La temporada 1979-80 es recordada por muchos por el MVP de Magic Johnson, que jugó como pivote en el sexto juego ante la lesión de Kareem Abdul-Jabbar. Fue tan buena su tarea, que el rookie se quedó con el premio al MVP de las finales, logro único si los hay al tratarse de un jugador tan joven.

Si comparamos los números de ambos, encontramos que Kareem promedió 33.4 puntos, 13.6 rebotes y 4.6 tapas por juego, mostrando un dominio en el juego en ambos costados de la cancha. Por su parte, Magic tuvo medias de 21.5 unidades, 11.2 recobres, 8.7 asistencias y 2.7 robos por encuentro, y estableció una marca negativa de 5 pérdidas por encuentro en las finales.

El pico del interno fue en el juego cinco, donde anotó 40 puntos, 15 rebotes, 4 asistencias y 4 tapas, mientras que el sexto y definitorio fue el consagratorio para Johnson y los Lakers, donde se despachó con 42 puntos, 15 rebotes y 7 asistencias, recordemos, jugando como pivote.

A partir de la lesión de Kareem, los Lakers no lo hicieron viajar al interno, con el objetivo de recuperarse bien en caso de un séptimo juego ante Philadelphia. Y esa sería una decisión que le costaría algo al interno al parecer.

Es que el periodista Bill Livingston, de Philadelphia Inquirer y uno de los que votó para elegir al mejor de aquella definición, expresó que el ganador del premio al MVP era Kareem. Sin embargo, CBS, la cadena de transmisión, no pensaba lo mismo, sobre todo porque si daban el premio no estaría el propio jugador para recibirlo.

En una entrevista con el medio Off The Bench, Livingston contó la realidad: “Un tipo de la CBS estaba recolectando los votos, y a todos los que votaron por el pívot de los Lakers les preguntaba lo mismo. "¿Estás seguro? Kareem no está en el edificio. Yo cambié mi voto y Magic ganó por 5-4. Un año después se lo conté a Kareem y le pedí disculpas”.

Así jugó Kareem en las finales de 1980: