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Argentina terminó el Mundial U17 con un anecdótico 10º puesto. En una categoría donde siempre se batalló contra las diferencias físicas sobre todo frente a las potencias, la albiceleste luchó y se midió ante Italia, Turquía y Nueva Zelanda, 3 de los 4 semifinalistas, y frente a Francia y Canadá.

En este contexto, el equipo de Leo Gutiérrez apoyó su rendimiento en la dupla Minzer-Kropp. Felipe fue el jugador más completo en las estadísticas y mostró una gran capacidad para jugar el uno contra uno, atacando a su ritmo y con buena visión de juego, además de capacidad para absorber los contactos físicos. Fue el segundo anotador con 17.4 puntos, segundo rebotero con 7.1, mayor asistente con 4.6 y el mayor robador del equipo con 3 recuperos por partido.

Kropp, por su parte, volvió a mostrar un buen entendimiento del juego, sin forzar en la pintura, donde tiene un gran juego de espaldas, y saliendo a tirar de tres o para atacar de frente el aro. Fue el goleador con 20 puntos (segundo en todo el torneo) y máximo rebotero con 7.4. Ambos jugadores venían de destacarse en la Americup U18, integrando quintetos ideales, y demostraron que ese roce ante jóvenes mayores les sirvió para llegar con otro ritmo.

Por su parte, una grata aparición fue la de Fidel Cifuentes Rotta. El ala pivote fue titular en todos los juegos y terminó como el tercer goleador del equipo con 8.3. Con buenas caídas del pick and roll y presencia en la pintura, el interno de 2.07 mostró tener talento para desarrollar a futuro, sobre todo a partir de haber logrado una buena presencia defensiva.

Iván Prato tuvo un torneo con altos y bajos, pero también será bueno seguir su desarrollo, con una altura de 2.09 y buena movilidad. Se lo vio jugar mucho de frente y sufrió el tema físico, pero sin dudas por biotipo y capacidad de los internos es el que mayor proyección presenta.

Desde el perímetro dos jóvenes a seguir por su capacidad de tiro son Matías Dominé y Martín Torriani, dos que aportaron su tiro y que por momentos se movieron de bases. A su vez, Tomás Scola jugó de alero y con sus casi 2 metros será importante su crecimiento desde el lanzamiento.

Una camada que tiene mucho por crecer y desarrollarse aún y que será interesante seguir para el futuro a mediano plazo de Argentina.

Alejandro Malky / [email protected]
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