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Show en Caballito. Lo de este Ferro ya es espectáculo y da gusto sentarse a verlo jugar. En definitiva, un plan perfecto para un viernes a la noche. Un equipo con alma, que pese a las lesiones de dos jugadores clave del plantel se reinventó y volvió a mostrar lo mejor de su repertorio. Transiciones rápidas, una movilidad de pelota que deleita y un plantel que sigue jugando y se mantiene como uno de los animadores de la Liga Nacional. Porque con la victoria 76-60 frente a Riachuelo, un Riachuelo poderoso desde los nombres y la jerarquía de su plantel, Oeste alcanzó un récord 10-5 y se mantiene en el podio del campeonato.

Ferro arrancó vertiginoso, corriendo la cancha como le gusta. Riachuelo se enredó en ese juego y perdió: Oeste plasmó un parcial 14-4, con dos triples al hilo de Theo Metzger, seis puntos de Jonatan Torresi, de gran partido, y dos de Marco Luchi. El inicio frenético de Oeste obligó a Farabello a pedir minuto.

Tras la pausa, el equipo riojano logró bajar la intensidad a un Ferro ya representado por la segunda unidad en este pasaje y el ajuste de la marca le permitió dejar sin gol a los dirigidos por Federico Fernández por más de dos minutos. Pero el buen tramo en defensa no se reflejó en ataque, donde Riachuelo continuó impreciso. Así, con un nuevo buen cierre, Ferro se fue 13 arriba.

El segundo cuarto fue mucho más físico y friccionado, sobre todo en la pintura, con un Ramiro Trebucq protagonizando un duelo personal con el ex Ferro, Ignacio Alessio. Pero en este juego fue Riachuelo el que se sintió más cómodo. Porque ante la firme defensa de Oeste, encontró los caminos desde el tiro de tres. Así, con un Selem Safar siempre efectivo en este rubro y de la mano de su extranjero Gary Ricks Jr, sumado al aporte de Espinoza, esta vez sí en la pintura, la visita metió un parcial de 10-3 para achicar a 6 la ventaja. También fue importante el trabajo de Rodrigo Sánchez, que no sólo fue el goleador de Los Eternos en el primer tiempo (10 puntos), sino que encima sumó con un importante desgaste en la marca.

Pero nuevamente la defensa de Oeste fue clave para cortar el avance de los de Farabello. Partiendo desde la entrega en la marca, para incomodar en cada ataque a Riachuelo, algo que quedó demostrado en el bajo promedio de tiros de campo de la visita en el primer tiempo (23%), Ferro volvió a construir su ofensiva y emparejó las acciones en el cuarto para finalmente irse al descanso largo 36-24.

La primera parte del tercero tuvo nuevamente a las defensas como protagonistas. Los dos se cerraron bien atrás, generando una merma en el goleo, más pérdidas por lado y hasta un crecimiento de faltas en ataque. Pero con el correr de los minutos, Ferro volvió a soltarse, recuperó su fluidez y cerró el parcial con una máxima de 19, con una bandeja volada de Juan Ignacio Laterza, de gran protagonismo en este buen pasaje verdolaga, en donde hasta se lució con un caño a Selem Safar y una posterior asistencia a Julián Morales.

Ferro no se relajó con la ventaja conseguida y mantuvo el nivel en el último cuarto para redondear el resultado. Estiró la ventaja a la máxima del partido de 23, y pese a que Riachuelo intentó con sus figuras revertir la historia, el resultado ya estaba escrito.

El goleador del Verdolaga fue Torresi, quien sumó 18; Valentín Bettiga aportó 9 rebotes y Rodrigo Gallego colaboró con cinco asistencias.

Después de las dos victorias en Caballito en el inicio del 2022, Ferro tendrá una semana sin partido, pero enfocado en la gira por Santiago y La Rioja, donde enfrentará al puntero Quimsa, a Olímpico y nuevamente a Riachuelo.

Boxscore oficial del partido