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Los Juegos Olímpicos llegaron a su fin y ya tenemos el mejor quinteto de Tokio. Desde la base encontramos al medallista de bronce Patty Mills. El australiano fue el faro ofensivo de los Boomers y lo corroboró en el partido ante Eslovenia, con 42 puntos (máxima anotación en un partido por medalla) y 9 asistencias. Además, Mills tuvo promedios de 23.3 unidades y 6.3 pases gol, lo que da muestras claras de su ascendencia en el equipo. Cumplió su objetivo luego de intentarlo desde su debut en el seleccionado en 2008.

Elegimos a Jrue Holiday como mejor escolta de los Juegos. A pesar de haber llegado sobre la hora luego de su título en la NBA, el perimetral se mostró desde el primer juego como un arma indispensable para Gregg Popovich en ambos costados de la cancha. Su intensidad defensiva y su determinación en ofensiva fueron claves para que Estados Unidos fuera mejorando con el correr de la competición y se quedara con el oro. Terminó con promedios de 11.8 puntos, 3.8 asistencias, 4.8 rebotes y 1.6 robos, números que no reflejan en su totalidad lo importante que fue para el equipo estadounidense.

Luka Doncic fue el otro perimetral elegido en el quinteto ideal. Comenzó el torneo con 48 puntos ante Argentina y una gran primera fase, que sostuvo hasta las semifinales, cuando Francia poco a poco logró frenarlo. Ya golpeado y cansado en el partido por el tercer puesto, poco pudo hacer ante Australia. Finalizó el torneo con 23.8 unidades, 9.7 recobres y 9.5 asistencias y recién en semifinales perdió por primera vez con su selección. A sus 22 años tiene el mundo a sus pies y será un dominador de los próximos años en el básquet FIBA.

Kevin Durant fue la estrella de los Juegos Olímpicos y el MVP del torneo. Fue el engranaje ofensivo que necesitó Estados Unidos para ganar. Antes del torneo, Popovich afirmó que de haberse negado a ir con el Team USA se habría arrodillado para convencerlo, y bien que hizo en jugar. 29 puntos en la final corroboraron su gran torneo que realizó, destrabando cada partido con sus infinitos recursos para anotar. Finalizó su paso por Tokio con el oro y promedios de 20.6 unidades y 5.3 rebotes.

Rudy Gobert cerró su mejor torneo con Francia con la medalla de plata en su pecho. Fue el estandarte defensivo en la pintura y supo definir cada vez que sus compañeros lo buscaron, desde el primer partido ante Estados Unidos hasta la definición del certamen. 12.1 puntos y 9.1 rebotes a lo largo de toda la competición muestran lo importante que fue para el equipo de Vincent Collet.