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Aunque LeBron James fue nombrado el MVP del torneo de los Juegos Olímpicos con un impresionante promedio de 14.2 puntos, 8.5 asistencias y 6.8 rebotes en los seis partidos que llevaron a Estados Unidos a su quinta medalla de oro consecutiva, la opinión pública dividió, y Charles Barkley, el exjugador y actual analista, ha sido uno de los más vocales al respecto.

Según Barkley, la carrera por el premio debería haberse reducido a dos nombres: Stephen Curry y Nikola Jokic. “Sin Jokic, Serbia no habría llegado tan lejos, y sin Steph, Estados Unidos no habría ganado el oro,” afirmó Barkley, subrayando la importancia crucial de ambos jugadores para sus respectivos equipos. Curry, en particular, impresionó con su explosiva actuación en la semifinal contra Serbia, donde anotó 36 puntos, casi rompiendo el récord estadounidense de Carmelo Anthony.

La crítica de Barkley se basa en la percepción de que James fue más consistente, pero Curry fue decisivo en los momentos clave, especialmente cuando Estados Unidos se enfrentó a una desventaja de 17 puntos en la semifinal. Con 89 puntos totales en el torneo, Curry superó a James en anotación, aunque el impacto de LeBron se sintió en otros aspectos del juego, siendo el segundo en asistencias solo detrás de Jokic.

Para Barkley, la explosión de Curry en los momentos más cruciales debería haber sido suficiente para merecer el MVP, y no simplemente un reconocimiento de la consistencia de James. Jokic también estuvo sobrado de argumentos para ser el premiado, liderando el torneo en puntos, rebotes, asistencias y robos totales, todo para terminar con un bronce ganando ante Alemania, el último campeón del mundo.