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La próxima clase del Hall of Fame postuló al Redeem Team de Estados Unidos, que recuperó el trono mundial en los Juegos Olímpicos de Beijing 2008. Sería el tercer equipo en tener su lugar en Springfield luego de los planteles estadounidenses de 1960 y 1992.

Y por eso creemos que el primer seleccionado internacional en sumarse a este Salón de la Fama debería ser el de Argentina, más precisamente la Generación Dorada. Y razones sobran para que reconozcan al equipo que dirigió Rubén Magnano y se colgó el Oro en Atenas 2004.

El primer punto a favor de la GD es haber sido el primer seleccionado en vencer a un equipo integrado por completo por jugadores NBA. Aquel triunfo por 87 a 80 ante Estados Unidos en Indianápolis 2002 cortó una racha invicta de una década y 58 partidos desde los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992.

“Me quito el sombrero por la Argentina. Los felicito porque jugaron de forma excelente” expresó George Karl, entrenador de aquel equipo.

Pero no todo quedó allí, sino que los dirigidos por Magnano lo volvieron a hacer en los Juegos Olímpicos del 2004. En Atenas, Argentina dio el gran golpe final y venció por 89 a 81 en semifinales ante Team USA, despojándolo del Oro por primera vez desde 1992. Sin ir más lejos, es el único seleccionado que los dejó sin el título olímpico desde el primer Dream Team.

Esos dos golpazos obligaron a Estados Unidos a cambiar todo y enfocar sus equipos desde otro lado. Mike Krzyzewski, entrenador elegido para esto, expresó sobre la GD: “El compromiso que tenían esos muchachos hacia su país y hacia el compañero, su hermandad, es lo que ocurre cuando tienes continuidad, compromiso y talento”.

Y agregó: “Eso fue lo que quisimos crear con el programa de USA Basketball. Buscar desarrollar un sentimiento que marque para quién estás jugando, no solamente ponerte una camiseta”.

Dos triunfos que golpearon y obligaron a Estados Unidos a cambiar. De estos éxitos devino el Redeem Team, ese que se motivó a partir de Argentina y la Generación Dorada y que ahora puede entrar al Hall of Fame. También cambiaron al mundo, que dejó de verlos como dioses, los bajó a la tierra y generó un enorme crecimiento.

Alejandro Malky / [email protected]
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